Despedimos a: Arthur Penn, Tony Curtis, Sally Menke y Gloria Stuart

Llevamos unos días en los que por desgracia tenemos que decir adiós a un par de actores, un director y una montadora.

De Arthur Penn podríamos decir que fue candidato al Oscar de Mejor director en tres ocasiones, con El milagro de Ana Sullivan (1962), Bonnie and Clyde (1967) y El restaurante de Alicia (1969). Además de estar nominado también al Globo de Oro como Mejor director por Bonnie and Clyde, la película por la que sin duda se le recuerda.

Aparte dio el salto a Broadway y luego volvió al cine, del que se terminó de distanciar porque la industria del cine demandaba otro tipo de películas diferentes a las que realizaba. Sus últimos trabajos fueron estrenados en cines fueron Dead of Winter (1987) y Penn & Teller Get Killed (1989).

Tony Curtis ha sido la pérdida más reciente esta semana, fallecido a los 85 años, confirmado por su hija, la también actriz, Jamie Lee Curtis.

Comenzó a realizar películas a finales de los años 40, y sin duda cuando más se le vio fueron en la década de los 50 y los 60 con numerosas obras como Con faldas y a lo loco, Trapecio, Espartaco, El estrangulador de Boston… su último film fue en 1999 con Los cazarecompensas.

Sally Menke era era una editora de cine con más de veinte créditos en películas desde 1984. Colaboró con Quentin Tarantino, del que montó todas sus películas. Fue nominada al Oscar por Pulp Fiction y más tarde, en 2009, también fue nominada por Malditos Bastardos. Su fallecimiento es de lo más repentino ya que fue hallada en un barranco.

Gloria Stuart es recordada por muchos por interpretar a Rose, de Titanic, cuando era mayor y rememoraba la odisea del barco, papel por el que fue nominada a los Oscar a sus 87 años, pero la verdad es que tiene una filmografía extensa a las espaldas, como por ejemplo El caserón de las sombras (1932), El hombre invisible (1933),  Un beso ante el espejo (1933) o Mi año favorito (1982). Realizó un parón de 40 años en el que se dedicó a la pintura, con numerosas exposiciones por Estados Unidos y Europa. Los 100 años que vivió, le dieron para mucho, sobre todo, para que la recordemos.