“¿Por qué Dios nos hace esto?” “El mundo se está acabando” “¿que hicimos mal?”
son las preguntas que el mundo entero se ha hecho con el duro número de desastres naturales que han habido en este año 2017.
Empiezo aclarando que Dios no contamina el ambiente con un ritmo de vida tóxico y letal para la naturaleza y otros organismos vivientes, esos somos nosotros, tanto tu y como yo somos tan culpables de todo lo qué pasa en el mundo.
Los “desastres naturales” como lo dice la misma son NATURALES y no significa el fin del mundo, más bien son desastres humanos por el hecho de que afecta civilizaciones en donde ocurre dicho evento meteorológico. Donde entramos nosotros aquí es que la actividad del hombre tanto a nivel industrial acompañado de su ritmo de vida tóxico provocan cambios importantes en el medio que crea un desequilibrio ambiental a nivel global, haciendo los “desastres naturales” sean de mayor magnitud.
El mundo no se acaba, todo lo que está pasando es completamente normal. Sin embargo, me sigo cuestionando ¿Cuando comenzaremos a tomar conciencia y salir de nuestra estúpida burbuja de comodidad? Estamos en un buen momento para abrir los ojos de una vez por todas.
Las fotos que publiqué son de la “Isla de basura” es una isla flotante de desechos, que conseguí en un portal dónde informan sobre esta preocupante isla, conocida como el séptimo continente por su gran tamaño casi igual al de Colombia. Ahí llegan a parar vasos, platos, envases de jugos, leche, cartón, entre tantas otras cosas que nosotros lanzamos a la basura diariamente sin algún remordimiento, cómodos día tras día alimentando el cáncer que mata nuestro hermoso ecosistema.
¡Despierta y date cuenta de que lo que crees normal no lo es!
Sal de tu zona de confort, utiliza opciones biodegradables y si no las hay ¡créalas! Existen platos biodegradables, cucharas, tenedores, autos ecológicos y hasta casas. No hay excusas, si eres más del montón de indiferentes es porque quieres así de simple.