Después del éxito de Cuba en EPU sobre derechos humanos llegó la mentira y el pataleo
Norelys Morales Aguilera.- Ante el éxito para Cuba en el desarrollo del Examen Periódico Universal (EPU) de las Naciones Unidas con amplio reconocimiento a sus avances en la promoción y protección de los derechos humanos, a la ultraderecha internacional y sus medios asociados no les queda más que el pataleo y la mentira.Una vez más El Nuevo Herald de Miami lleva la delantera, empleando para agredir a Cuba una organización no gubernamental que acusa a la Isla de “fraude” durante el ejercicio EPU.
Se trata de UN Watch, una organización no gubernamental con sede en Ginebra, cuya misión declarada es "para monitorear el desempeño de la Naciones Unidas por el rasero de su propia Carta " afiliada a la American Jewish Committee y patrocinado por la El Congreso Judío Mundial.
Desde la creación de UN Watch, "gran parte de sus esfuerzos se han centrado en el control de la continuación del tratamiento discriminatorio de Israel en el sistema y las actitudes hacia Judíos en el organismo mundial, así como los aspectos que conciernen a los intereses norteamericanos de la ONU", señala Wikipedia.
Con tales antecedentes hay que esperar una conclusión sesgada que viene muy bien a la línea editorial del periódico de la mafia miamense y al periodista especializado en difamaciones contra Cuba Juan O. Tamayo, cuyo titular lo dice todo: “Cuba financió grupos para manipular reporte de derechos humanos”.
El reconocimiento que tuvo Cuba es lo que les abruma. Entre las organizaciones que expusieron sobre la situación de los derechos humanos en la isla están la Federación de Mujeres Cubanas, la Federación de Estudiantes Universitarios y la Unión de Pioneros de Cuba, así como la Asociación de Amistad Rumano Cubana, el Club Leogane de Amigos de Cuba en Haití y el Comité Nacional de Solidaridad con Cuba de Sri Lanka.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU (UNHRC) recibió informes de 454 organizaciones que hablaron bien sobre Cuba informó UN Watch. No lo podían creer y solo les quedó la mentira del fraude. El pataleo quedó en que “Tanta alabanza del régimen despertó las sospechas de muchos investigadores”.