Con una historia de Philip K. Dick es difícil cagarla, pero no imposible.
Aquí estamos al borde mismo de la cagada no sé ni cómo no se ha convertido en una caca gigante pero lo ha conseguido a pesar del mal ritmo, a pesar de la penosa presentación de personajes, a pesar de que la excusa en sí me parece de lo más ñoño,pues no la caga.
¿Será por Terence Stamp? Quien tiene la capacidad de hacerte sentir que estás viendo algo muy bueno y muy interesante.
¿Será tal vez por Emily Blunt? Quien por un momento te hace pensar que ella habría sido un perfecto Cisne Negro.