Era un destructor de la Armada Española perteneciente a la clase Churruca. Su nombre era en honor al teniente de navío don José Luis Diez y Pérez de Muñoz. Construido por la Sociedad Española de Construcción Naval de Cartagena. Colocándose la quilla el 4 de noviembre de 1927. Fue botado el 25 de agosto de 1928, y entregado el 13 de septiembre de 1929. Recibiendo su bandera, de manos de la hija de tan ilustre marino, el 27 de marzo de 1930 en San Fernando (Cádiz). Sus primeras acciones, comienzan al embarrancar en Ibiza en abril de 1932, aunque pudo ser liberado tras duros trabajos. El 5 de octubre de 1934 intervino auxiliando a la Guardia Civil en Villanueva y Geltrú, durante los hechos acontecidos en la Revolución de octubre, el año 1934.
El 16 de julio de 1936, se encontraba en dique seco en Cartagena, al mando del capitán de fragata Casimiro Carre Chicarro. El 21 de septiembre de 1936, con el país metido de lleno en la Guerra Civil, las autoridades republicanas, ordenan a la escuadra dirigirse al Cantábrico, adonde llegan a Gijón dos días después, trasladándose después a Santurce. Esta escuadra estaba compuesta por el acorazado Jaime I, los cruceros Cervantes y Libertad, y los destructores Almirante Antequera, Almirante Miranda, Almirante Valdés, Alsedo, Lazaga, Lepanto y el José Luis Diez, junto a tres submarinos de la clase C.
Al José Luís Diez le apodaron acertadamente «Pepe el del puerto», pues pasaba más tiempo en puerto entre reparaciones y averías (figuradas o no) que operando en el mar.
El 31 de mayo de 1937, la Marina de Guerra Auxiliar de Euzkadi, se hace cargo de los destructores Ciscar y José Luis Diez, sustituyendo a sus dotaciones, por no confiar en ellas, embarcando marineros de su confianza. Diez días después ambos destructores, el Ciscar al mando del alférez de navío don Juan Antonio Castro, y el José Luis Diez por el teniente de navío Evaristo López, mantuvieron un intercambio de disparos con el crucero sublevado Cervera, mandado por el capitán de navío Manuel Moreu, que no tuvo consecuencias. El 15 de junio ambos destructores, ante la inminente llegada de los sublevados a Bilbao, a refugiados y diversas personalidades civiles y militares, que aprovechan para desertar. Tras lo cual los destructores se trasladan a Santander. Al caer la ciudad, se dirigen a Gijón, desde donde el José Luis Diez, en solitario, se refugió en Falmouth (Inglaterra), en donde aprovecharon para desertar, entre otros, el comandante, el jefe de maquinas y el oficial de derrota, dirigiéndose a continuación a Le Havre (Francia).
En Le Havre, se efectuaron reparaciones, tomando el mando el alférez de fragata don Juan Antonio Castro Izaguirre, con la orden de llevar el buque a Cartagena. Zarpa de Le Havre el 20 de agosto de 1938, y para intentar romper el bloqueo impuesto por los sublevados, se hace pasar por el destructor inglés HMS Grenville, de la clase H, de la que se inspiraban los destructores de la clase Churruca. Descubierto, fue interceptado el 26 de agosto, por la flota sublevada. Tras recibir un disparo en la banda de babor en proa, procedente del Canarias, se refugió en Gibraltar, teniendo que reparar averías por sus medios, ya que el Almirantazgo se negó a facilitarle sus instalaciones, marcando como plazo el 30 de septiembre para abandonar Gibraltar, bajo la amenaza de ser incautado. Tras varios intentos para salir, la noche del 29 al 30 de diciembre zarpó. Consigue esquivar al cañonero Calvo Sotelo y al Júpiter, pero es interceptado por el Vulcano, iniciándose el combate. Averiado y sin posibilidad de escapar, embarranca en la playa de los Catalanes, en territorio británico. La tripulación es apresada e internada en prisión, por fuerzas británicas, que los trasladarán posteriormente a bordo de dos destructores hasta Almería. El buque fue entregado a la armada franquista, el 25 de marzo de 1939.
La última acción, antes de ser dado de baja el 1 de diciembre de 1965, tuvo lugar, durante los incidentes con el gobierno de Marruecos, concretamente el 7 de diciembre, cuando una flota de la Armada Española se apostó en zafarrancho de combate, frente a Agadir, apuntando con su artillería a diversos objetivos.
El José Luis Diez, tenía un Desplazamiento de 1.800 T., una eslora de 101,98 m, manga de 9,67 m, con un calado de 3 m. Estava propulsado por 4 calderas Yarrow, con 2 turbinas Parsons y 2 hélices; lo que le daba una potencia de 42.000 CV, alcanzando una velocidad máxima de 36 nudos, con una autonomía de 2.924 millas a 13 nudos.
Estaba armado con 5 cañones Vickers de 120/45, 1 cañón Vickers AA de 76,2 mm, 6 TLT de 450 mm y 2 morteros lanzacargas.
La tripulación estaba compuesta por 190 hombres.