Seguimos con una discreta ampliación de lo que son los determinates familiares de la realidad de cada niño:
1.1.- Determinantes familiares. Composición familiar. Estructura. Componentes. Historia familiar. Pedigree (Árbol familiar). Edad y sexo de cada miembro. Nivel educacional. Nivel económico. Proyecto familiar y expectativas.
Conocer la estructura de la familia es capital para entender la realidad de cada niño. No se puede dar por supuesto nada porque la composición de las familias ha cambiado enormemente en los últimos 50 años. No es que antes las cosas fueran más simples; más bien es que se mantenían estructuras forzadas por la presión social y en contra de voluntades totalmente legítimas. Los determinantes de los cambios han sido los reconocimientos de derechos, especialmente de las mujeres, que respetaban su independencia, ayudados por dos factores principales: el acceso al mundo laboral-profesional y el control de la natalidad. El primero contribuye a la independencia económica y el segundo a la planificación de la descendencia, responsabilidad biológica de las mujeres. La amplia variedad de modelos: biparentales, monoparentales, de paternidad biológica, adopciones, subrogaciones, homosexuales, etc. se debe conocer sin introducir elementos de juicio crítico. En teoría y en cuanto a derechos, no deben haber diferencias. Aunque, y como decía un torero famoso, con un profundo acento andaluz: “Es igual, pero no es lo mismo“. Especialmente a la hora de evaluar determinantes genéticos de la salud y de la enfermedad, cada vez mejor conocidos y de mayor trascendencia.
Igualmente importante es obtener información sobre el nivel educacional de los progenitores y, en todo caso, para establecer discriminaciones positivas. Sobre todo cuando haya que realizar recomendaciones de una cierta complejidad que requieran algunos conocimientos.
El nivel económico puede ser un dato más frío y sólo de importancia en los niveles más extremos, en los que la precariedad y las penurias tengan relevancia. (En una consulta de Atención Primaria, al prescribir una prueba complementaria, para cuya realización había que acudir al hospital algo distante, la madre anunció que no podría ir hasta pasados unos días porque no tenía dinero para el autobús…)
Algo más complejo y menos común a inquirir es cuál es el proyecto familiar y las expectativas que la familia tenga. Este tipo de encuesta requiere tacto, habilidad, discreción y capacidad de interpretación de la información que se obtenga.
Todo lo dicho puede conseguirse en un breve intercambio conversacional, pero tampoco hace falta hacerlo todo a la vez y todo en la primera visita. La madurez del facultativo o el profesional sanitario, y sus habilidades relacionales lo harán más o menos fácil. En cualquier caso la información siempre es conveniente y su propósito es mejorar el conocimiento del niño y su entorno.
X. Allué (Editor)