Los problemas de la crisis se han reducido a los problemas de la deuda. Y la deuda amenaza con llevarnos por delante, a todos. A todos no, a los banqueros no, a los pobres, desvalidos, clases medias occidentales, empresas productivas, fábricas, gobiernos y países enteros.
Esta sí es la muestra de una ofensiva neoliberal, meridianamente clara en EEUU y en Europa, (de tanto avisar que viene el lobo, cuando se ha presentado el grito ha perdido fuerza.) La posible debacle americana por quiebra del Estado, (muchos aseguran que es imposible) se reconduce a los acuerdos adoptados entre demócratas y republicanos, que consisten en esencia en introducir los recortes sociales que la derecha americana perseguía, otra reducción en su ya pequeño estado de bienestar. Porque Asia y emergentes pueden sustituir en condiciones más baratas de producción y reproducción a estos trabajadores occidentales.
Es cierto que la inmensa deuda de EEUU (14.5 billones de $) empezaba a preocupar, que su bajada en la calificación de triple A sería altamente problemática para ellos, y para China y Japón, porque perderían valor sus bonos, la rebaja de calificación elimina millones de órdenes de compra de deuda de miles de fondos de inversión que derivan altos porcentajes de inversiones a bonos triple A, la más alta seguridad. Lo cual bajaría el precio inmediatamente de los bonos existentes, de ahí las pérdidas de sus tenedores, y aumentaría el tipo de interés que tendrían que pagar por su futura financiación, dificultando en mayor grado el crecimiento económico.
Algo similar ocurre en Europa, aunque hemos gastado montonazos de miles de millones menos que en EEUU, pero los problemas de deuda amenazan de forma parecida, con la parálisis de los consabidos Grecia, Irlanda, Portugal, y nuestro nuevo descenso a los infiernos de España, Italia, y se pone en posición Bélgica. La diferencia de 400 puntos básicos, un 4% mayor nuestros pagos por endeudamiento que los alemanes, tira por tierra las ya débiles posibilidades de recuperación de la economía española, son miles de millones más los que tendremos que pagar de intereses. Las dificultades en el crecimiento económico minan las posibilidades de pagar la deuda y de salir de ese círculo vicioso de más altos intereses, mayor deuda, menor posibilidad de pago, menor crecimiento, menor trabajo.
El Euro ya está en juego, y mucho más que eso, un modelo de sociedad y de cohesión social es lo que se está destrozando. La lucha contra la deuda y no contra la crisis está generando la oportunidad de volver a caer nuevamente en crisis sin casi haber salido (nosotros no aunque otros países salieron tímidamente hace un año), es muy probable que otra recesión vuelva a hacer su aparición en el horizonte. La economía americana, que es el motor que mueve al resto, parece que frena, de la mano del ala derecha de los republicanos.
Mientras tanto el mundo se llena de parados y crisis alimentarias con pocas perspectivas de crecimiento. Las fábricas van parando, la sobreproducción aparece en escena y en caso de necesidad se tienen las inmensas fábricas asiáticas. La desesperación mundial aumenta y podríamos pasar a un escenario de tensiones y violencias en el que nada quedara descartado. No las cosas no son de hoy para mañana, pero estamos en la vía. Y tomar las bridas del capital financiero se está tornando harto peligroso.
Pd. Y nuestros locos particulares creyendo que por cambiar a ZP x Rajoy estas cosas se arreglan, y lo siguen pregonando por todas partes, y se lo creen. Dios mio en que manos estaremos.