Salir de la crisis pasa por la devaluación interna. Pasa por ahí, no por otro lado. Por mucha austeridad que apliquemos lo único que sacaremos en claro es que cada vez el sector público desactivará más y más la economía y profundizará la crisis, y a su vez recaudará cada vez menos y menos y tendrá que endeudarse más y más, lo cuál llevará a que se pidan recetas de más y más austeridad.
No sé, así, hasta que se yo… El IBEX llegue a 0 como bromeaba Jorge Galindo por twitter.
La clave está en devaluar internamente sin destruir actividad.
Ya, ya sé, pido magia. Pero como mínimo pongamos el ojo en donde tenemos que dirigirnos. Necesitamos devaluar, porqué respecto a toda la zona euro nuestra economía no es competitiva. Podemos creer como medio PSOE que Hollande nos va a sacar las castañas del fuego. No, Merkel se ha vuelto loca, ya lo estaba, tiene un modelo económico suicida, no está a favor ni de eurobonos ni mandangas. Esperar que el BCE haga algo razonable y deje de autosuicidarnos a todos es esperar algo absurdo.
Al menos los próximos meses no va a ocurrir. Pero aunque el BCE y Alemania se ponga a hacer algo más que reclamar austeridad como posesos, no va a corregir las desventajas competitivas de nuestra economía.
Recordemos, vivíamos un mundo chipiritifláutico sobredimensionado gracias al dinero que nos llovía de europa en forma de créditos bancarios.. y recordemos, también los alemanes vivían en un mundo chipiritifláutico donde los bancos españoles ofrecían un lugar a los ahorradores alemanes donde invertir y conseguir mejores intereses que los aburridos bancos alemanes.
Todo ese mundo se ha desmoronado, las viviendas no valen (o al menos ya no se pueden vender al precio) lo que decían los tasadores, por tanto los créditos se aguantan en el aire y no en vienes de piedra picada indestructibles, nuestros bancos son de humo y los que tienen deuda de bancos españoles intentan que esto no se desmorone por la vía directa porqué son los siguientes en caer (lean bancos alemanes que han prestado a los bancos españoles).
Eso implica que los salarios, beneficios de las empresas, resultados financieros, valores inmobiliarios de la primera década del siglo XXI están hinchados, precisamente empujados por la burbuja inmobiliaria que nos ha producido una cosa curiosa: tener la sensación de que éramos más pobres (cada vez más teníamos que dedicar mayor porcentaje de nuestros ingresos a la hipoteca o el alquiler) a la vez que hacíamos menos competitivas las empresas al alejar los salarios de la productividad. Y eso que contábamos con ciertos mecanismos de moderación salarial en la negociación colectiva y ciertos sectores no se les ha ido la mano, que si no…
Por tanto, los salarios han de bajar, los beneficios han de bajar. Algún banco ha de petar y los ahorradores alemanes o de cualquier lugar que hayan apostado por deuda de bancos españoles van a tener que joderse un poco.
Porqué es lo que tiene una devaluación interna.
Lo digo yo, lo dice Krugman, el FMI va más allá en cuanto a la devaluación interna bancaria y que esta ha de ser sin destruir servicios públicos y lo dice cualquiera que mire los números.
Devaluación ¿no traumática?
Solo hay dos maneras no especialmente dolorosas de devaluar una economía para hacerla más competitiva, devaluar la moneda, y no, no se puede, estamos en el Euro. Que la inflación crezca lo suficiente para que en los nominales no se note, cosa que al parecer el BCE tiene miedo de provocar.
Con lo cuál descartémosla. Toda cosa que intentemos hacer tendrá costes dolorosos. Pero, visto lo visto, al parecer la vía directa y quirúrjica que asumieron los islandeses parece mejor que la larga agonía a la que nos están sometiendo.
Caer los salarios ¿un 15%?
Hay que hacer devaluaciones nominales dolorosas. Por el momento y la actual reforma laboral lo profundiza, se produce esta devaluación por la vía de la destrucción de empleo y de actividad económica. La peor vía, porqué un crecimiento del 10% de desempleados es peor para la economía que todos los trabajadores perdamos un 10% de nuestro poder adquisitivo.
Por otro lado, la caída de actividad no solo de empleo conlleva más gente arruinada, más defaults bancarios, más problemas para los bancos que tendrán que hacer una devaluación aún mayor. Por otro lado, la sensación de “vamos a morir todos” se incrementa y la sensación subjetiva de la cuál hablaba Keynes, los ánimal spirits de la crisis son peores.
El Acuerdo de Negociación Colectiva del 2012 al 2014 que firmaron en enero patronal y sindicatos iba por el buen camino. Durante todos estos años de la crisis se han salvado cientos de miles de empleos solo negociando ERE de suspensión, reducciones de sueldo, etc.. en lugar de despidos. Esa devaluación que ha podido hacer la mediana y la gran empresa es algo que con la AENC se pretendía llevar a la pequeña empresa, permitiendo mecanismos ágiles pero mediados de descuelgues de convenios y apoyo a las empresas pequeñas para buscar mecanismos pactados para salvarse.
Todo eso queda roto con la reforma laboral, y aunque la patronal y los sindicatos están por la labor, la verdad es que si eres empresario, ahora tienes pocos incentivos a pactar nada. Y realmente los mecanismos pactados son más difíciles de aplicar que simplemente echar gente, por tanto, como ya los datos indican.. la reforma laboral provoca que se profundice en el mecanismo de despido y no en el de medidas de flexibilidad interna.
Eso sí, todo esto no quita una cuestión. Se podría tener unos 10 puntos menos de desempleo cobrando un 15% menos todos. Y digo “se podría”. Ya que lo que no sirve es cualquier reducción salarial por decreto ley, y por la vía de la aplicación generalizada por la cara. Tál y como se ha pretendido aplicar esta devaluación, lo que da como resultado es destrucción de empleo, sobretodo en los sectores y empresas menos sindicalizadas. La recuperación de empleo no sería lineal porqué aunque hubiera una devaluación interna en todos los apartados que indicaré, la caída de salarios no dejaría de sentirse en el consumo sobretodo de bienes importados lo cuál termina afectando a la creación de actividad económica.
Devaluación pública sin eliminar servicios públicos
Parece un sinsentido y que pretenda inventarme la máquina de producir billetes. No, no la tenemos. Es cierto. Y quiera o no Europa, los países en crisis de la zona euro van a incurrir durante unos años en incumplimiento del déficit. Europa solo puede esperar dos cosas, que este incumplimiento dure 3 o 4 años o 30 o 40. Ella escoge, o nos echa.. pero es imposible que un país como España, en plena espiral de austeridad pueda no incurrir en déficit. El sistema se retroalimenta de ella para ser cada vez más pobre y recaudar menos.
Pero hay formas de devaluar sin eliminar servicios públicos y manteniendo cierta actividad económica. Está claro que no tendríamos que haber invertido tanto durante los años previos a la crisis. Hemos hecho keynesianismo inverso, cuando llegaba el dinero las administraciones gastaban siendo procíclicas. Y ahora recortamos siendo aún más procíclicas. Pero eso no lo podemos cambiar, no podemos decir “ojalá no hubiéramos gastado tanto”, no porqué tendríamos ahora un cajón con dinero del que tirar, sino más bien porqué no hubiéramos hecho más gorda la burbuja y la devaluación del sector privado tendría que ser menor.
Pero hay devaluación que se puede hacer. La caída de salarios también entre los trabajadores del sector público. Sí, se que salgo del discurso oficial de la izquierda y en parte del que dicen los sindicatos del sector (aunque son conscientes que es mejor menos salarios que despidos). Pero es así, la devaluación del sector privado obliga a devaluar el sector público. Soy consciente de que a los trabajadores públicos de algunas administraciones (en especial el AGE) llueve sobre mojado y que requerirían cláusulas para recuperar el poder adquisitivo.
Ahora mismo tienen un 5% menos al que se le acumulará otro 5%. Seguramente tendrá que ser un 5% más en los próximos años, a lo cuál se sumará la devaluación por inflación. Sí, una putada, bien gorda. Pero más lo es que se despidan a los interinos, que se envíen a la calle empresas privadas que hacen servicios públicos porqué no se les paga, eliminar servicios esenciales, etc..
Quitar grasa al sector público no significa las actuales políticas de austeridad
Quitar grasa al sector público. Aquí es lo que nos vienen con el cuento de la austeridad. Noooo… hijo nooooo. Reducir las herramientas de políticas de empleo, no es austeridad, es quitar la botella de agua a los sedientos el día que más calor hace. Eliminar las ayudas al tercer sector para integrar discapacitados en el mercado laboral es ser un cafre desalmado.
Quitar grasa al sector público es identificar los servicios que se están dando de forma ineficiente, identificar puestos de libre designación sobrantes, identificar los puntos negros de la administración y poner manos a la obra. Pero eso no se hace por la vía directa como pretenden. Eso es lo fácil y lo que más daño causa. Podemos suponer por ejemplo que los gastos en mecanismos de mediación sociocultural son sobrantes y eliminarlos… mañana luego tenemos un cipostio en un barrio con un grupo de jóvenes que le pegan fuego a los comercios debido a que el nivel de paro está por las nubes y que no hay un mediador sociocultural que les haya encauzado o haya identificado el problema. Este adelgazamiento de grasa se hace quirúrgicamente, identificando realmente lo que no aporta valor… o por ejemplo redirigiendo recursos hacia otras funciones. Por ejemplo, ahora no hay tanta obra privada, y tantos arquitectos y técnicos en licencias son sobrantes, pero en cambio hay algo de obra pública y se siguen externalizando proyectos.. Pon tus arquitectos municipales a llevar proyectos que antes externalizabas porqué ahora no tienen que dedicar tanto tiempo a licencias.
Lo fácil es despedir los arquitectos de licencias si es que puedes, no ponerte a pelear con estos para que pasen a hacer otras funciones.
El déficit público durante varios años.
Incurrir en déficit público, queramos o no. Vamos a incurrir en déficit público. El tema es asumir que esto van a ser 3, 4 o 5 años, o bien va a ser 30, 40 o 50 años. Significa que tendremos que pagar más en el futuro para financiar los intereses de esa deuda, que tendremos que pagar esa deuda, significa que la devaluación se prolongará hacia el futuro. Si se es firme en esta postura al final lo van a tener que asumir en la UE o darnos una patada, algo que podría ser posible pero es como la amenaza nuclear, si lo hacen, los bancos alemanes se van al garete pillados por toda la deuda española. Y como ese es el peor miedo que tiene la canciller alemán que es quien más insiste en no incurrir en déficits no nos echarán.
Tener claras que inversiones públicas son chulas, rentables, atraen actividad, generan incentivos, etc.. Y es algo que no tenemos. O peor, las hemos hecho en época de bonanza junto otras muchas no tan justificadas. Hay que hacer un ejercicio de imaginación keynesiano para ver cuales son las inversiones públicas que en plan quirúrjico van a causar incentivos económicos.
Facilitar que venga el megacasino de los monegros II Eurovegas no es la solución. Tampoco hacer olimpiadas en la capital del reino, o pretender sustituir el puerto de Barcelona por un superbarrio de lujo y aparcamientos de superyates. Señores gestores públicos piensen mejor… ¿el corredor mediterraneo ferroviario de mercancías?, ¿una estrella de la muerte?, piensen, piensen, y si no, consulten a Germà Bel. No tendremos tantas inversiones chachimolonas como durante esta época, a lo mejor los aeropuertos peatonales no los podremos hacer, pero estaremos haciendo una inversión que el retorno económico sea claro e indiscutible.
Sabemos que retrasar el corredor mediterráneo ferroviario es un error económico de tomo y lomo. De estas hay algunas, en las que podemos centrarnos. Y dejarnos de tonterías que se reclamen desde localismos absurdos. Hoy en día pretender que Zamora vaya a ser el centro logístico de exportaciones es un churro que no nos lleva a nada, es el pensamiento irracional público que nos ha movido (y sigue moviendo), y disolver la poca inversión pública en tonterías nos va a llevar a la nada (aún me doy con una piedra en la boca por defender el plan E). Invertir en Fórmula 1 a la vez que destruyes puestos de trabajo en las escuelas municipales es del género idiota. ¿Cuanto valor añadido nos deja Eclestone? ¿Cuanto valor añadido nos deja el tener unos niños formados desde el inicio de su vida?
Los recortes a las subvenciones, el gran mito de los que venden la austeridad sistémica
Es un mantra, un buen mantra que repiten todos. “Recortemos las subvenciones” A partidos, sindicatos, entidades, asociaciones, etc.. Cuando la única entidad que recibe muuuuuchas subvenciones es la iglesia. En cuantías de miles de millones. Pero es que yo hasta estas me las miraría antes de recortar. No es solo porqué Caritas y gente así de maja ayuden al sector público a contener la demanda que a lo mejor sería más cara de atender en servicios sociales. No, Cáritas no deja de ser las migajas de lo que recibe la iglesia. Es que la iglesia cubre un sector educativo, que tal vez molaría que lo diera el sector público o entidades laicas, peeeero, ¿podemos sustituirlo en un santiamén?. También hay un montón de iglesias y patrimonio histórico que se mantiene de forma barata gracias a esta subvención. ¿El sector público es capaz de mantener y/o hacer explotación económica de muchos monumentos?.
Yo estoy más bien por una desamortización paulatina y razonable. Si de la Mezquita de Córdoba la iglesia saca 8€ por visitante y encima no paga impuestos, esa sí, se la desamortizamos, la explotamos públicamente y el beneficio va a todos, porqué el patrimonio es de los españoles no de la iglesia católica. En cambio, si para mantener cientos de iglesias, ermitas, pequeñas catedrales, etc.. que no tienen una demanda turística que la pueda sostener y está siendo sostenida gracias al esfuerzo de los curas y monjas que con salarios de risa las cuidan.. Leñe, sigamos haciéndolo mientras no podamos pagar ese mantenimiento.
Por otro lado, podemos decir “no habrá subvenciones a partidos” y lo que provocará es que haya más incentivos al famoso 3%. Queramos o no, los partidos necesitan financiación para funcionar, y la democracia necesita que haya partidos. Los partidos viven más de las aportaciones que hacen sus cargos públicos que de las cuotas de los afiliados o de las subvenciones directas. Actualmente el sistema genera muchos incentivos para que los partidos coloquen gente en la administración para que de forma indirecta se financien. ¿Queremos eso o simplemente un sistema transparente y suficiente de financiación de los partidos políticos? NO tenemos los partidos políticos más subvencionados, sino que son relativamente baratos, y encima nos quejamos de la falta de calidad de estos. Señores, tenemos lo que pagamos. Y lo que votamos.
Subvenciones a sindicatos, asociaciones, movimientos sociales. Sí, suena muy bien, pero esto ya es las engrunas más engrunas del gasto público. Entre otras, hay algunas que van por ley. Los sindicatos tienen la obligación de que sus negociaciones afecten también a los trabajadores afiliados y no pueden aplicar el mecanismo alemán de cobrar por aplicar el convenio, y por tanto el Tribunal Constitucional estableció mecanismos que obligan a que las administraciones financien a estos en proporción a su representatividad en las elecciones sindicales. Por otro lado muchas entidades, igual que la iglesia, hacen funciones sociales que serían más caras de hacer desde el sector público.
¿Queremos hacer más eficiente el tercer sector? De acuerdo, pongámoslo en la devaluación interna (aunque os aseguro que los trabajadores del tercer sector cobran bastante menos que los del sector público), pidamos más corresponsabilidad con los resultados, ¿pero recortar a quien nos evita que el servicio público se desborde? Nos va a salir más caro, aunque sea en lo que nos costará en conflictos sociales, daños que se propagarán durante décadas.
La devaluación bancaria, lo que no quieren afrontar
Algo que no quiere que entremos, pero que hemos de hacerlo. Es la piedra de toque y además la que más daño podemos causar en toda la zona euro. Lo que estamos gastando de todos lados para evitar que se produzca.
Yo ya no estoy tan seguro que dejar caer uno o dos o tres bancos vaya a desatar un caos peor del que vivimos. Los islandeses lo hicieron y vieron desplomar su PIB 15 puntos, pero ahora están creciendo. Es verdad que a priori una devaluación del PIB de 15 puntos pueda parecer un drama, ¿pero es peor lo que vivimos españoles, italianos, irlandeses o griegos?.
Aquí está el quid de la cuestión. Si dejamos caer un banco, por ejemplo, Bankia. ¿Qué pasaría?. Comienzo a ser de los que piensa, como Marc Vidal, que la cosa está lo suficientemente podrida como para que lo mejor sea que algún banco y sus ponedores que se lucraron de gustosos intereses, sean los que paguen.
Es evidente que la credibilidad del sistema financiero español se vería resentida, ¿pero no lo está ya? ¿no huyen de los bancos españoles todo sistema financiero serio para evitar pillarse los dedos?
Nuestros inmuebles no valen lo que nosotros decimos que valen, estamos devaluando salarios, beneficios, ingresos, y por tanto los bancos han de asumir su parte de devaluación. No tenemos fondos infinitos y el keynesianismo no dice que “pongamos dineros ilimitados en el sistema financiero” sino que el sector público gaste directamente en proyectos que sostengan el estado del bienestar y fomenten la actividad económica. Tirar billetes para tapar un agujero negro NO es keynesianismo, es suicidio.
Hemos de asumir que nuestras viviendas no valen lo que valen, que los que tenemos una hipoteca realizada en la década pasada su valor de compra-venta está unos cuantos puntos por debajo, que posiblemente tengamos una deuda superior al valor de nuestra casa. Pero eso también lo ha de asumir nuestro banco, y los inmuebles que se ha comido, digerirlos y si no es capaz, quebrar. La cruel realidad del capitalismo ha de llegar a los que están en la cúspide del sistema capitalista, no solo a los pardillos que nuestra principal fuente de ingresos no es lo que hacemos con nuestro capital.
Puede que la idea de quebrar uno, dos o tres bancos sea temible. Pero es que si no ocurre, nos costará, y nos está costando mucho más (y lo estamos pagando en peor servicio sanitario, en no poder acceder a crédito para la economía productiva, en un parón de toda la economía y en más impuestos) la alternativa de tirar dinero y no parar.
Al final la solución islandesa es más aceptable que lo que vivimos. Aunque seamos un 15% más pobres. Ahora mismo no sabemos ni cuanto más pobres vamos a ser. Aunque no tengamos moneda propia, podemos dejar caer esos bancos y dejar de rescatarlos ad-infinitum. Sí, los ponedores del banco podemos ser tú y yo con nuestros ahorros, vivir corralito, podemos imaginar los peores escenarios.
Pero el rescate contínuo no garantiza que este escenario no se produzca, lo único que garantiza tál y como está demostrado es que se retrasa lo peor sin darnos tiempo ni margen para paliar los daños, solo alargar la agonía y retrasar la recuperación.
Medidas como la dación en pago en las nuevas hipotecas además ayudarían a ser más responsables a los bancos. Actualmente el sistema tiene tantos incentivos para repetir la burbuja inmobiliaria que podemos volver a las andadas y eso es lo que más temen desde fuera. Nuestra capacidad de crear burbujas sobre burbujas es bastante poderosa.
Repartir los daños
Los ricos han de colaborar. Me es igual que esto represente “poco” o “algo poco”, la realidad es que aumentar la presión fiscal al 10% más rico un 5% representa una cantidad superior a los recortes en sanidad y educación que sufrimos el 90% restante. Las crisis incrementan la desigualdad entre ricos y pobres, no solo en nivel de ingresos brutos sino en la redistrubición que hace el estado del bienestar esta queda debilitada. Es lógico que la alta patronal española pida reducción salarial, ajustar los salarios a la productividad, etc.. lo que es también lógico que las altas rentas, que más han tenido que ver con la burbuja inmobiliaria, más se han beneficiado de ella y que ahora sufren menos que otros la crisis, también aporten su grano de arena. La presión fiscal española es relativamente baja, y el fraude fiscal también es de los más altos. Por tanto, seamos competitivos en este aspecto. Cuestiono profundamente la amnistía fiscal, no solo por sus efectos morales, sino por sus desincentivos a la hora de que los que tienen dinero paguen sus impuestos. ¿No decían los neoliberales que subir impuestos harían que más gente defraudara? ¿Que hace una amnistía fiscal sino?
Aunque esto represente migajas (cuando hablamos de cifras del orden de 70.000M€ en fraude fiscal o recaudar 15.000 o 20.000M€ con aumento de presión fiscal, posiblemente no sean migajas tan pequeñas), son migajas que ayudan a repartir el esfuerzo entre todos. Facilitan también la aplicación de otras medidas nada populares, ¿o es que la conflictividad social es algo que descontamos ya de las ecuaciones económicas hasta el punto de ignorar sus efectos?.
El discurso del stablishment es que los ricos “ya pagan mucho” y no se les puede satanizar. Ni pagan tanto, ni tampoco significa que incrementarles la presión fiscal se les satanice más que a los asalariados que les reducen el sueldo o van al paro.
Lo lamentable es que no hay quien plantee un escenario de devaluación y competitividad creible
A todo esto.. NINGÚN partido, ni tan siquiera el mío tiene esto en la agenda. La nueva dirección de la CEOE y los sindicatos son capaces de negociar algunos de estos aspectos con responsabilidad, algún outsider socialdemócrata no para de repetir estas consignas, en el Banco de España también repiten cosas parecidas (pero obvian la parte de presión fiscal a las rentas altas o una racionalización del estado del bienestar que no destruya servicios) pero no existe en España disposición de quienes han de tomar estas decisiones. Tampoco en Europa… Mientras esperemos que los que pueden y podemos actuar en el ámbito micro vayan haciendo, porqué si hemos de esperar inteligentzia desde arriba vamos servidos… ¡si es que ni leen!
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