Di no a la mistificación

¿Qué ganan los charlatanes con divulgar información falsa con tintes “científicos”? Como esos pseudo-investigadores que en su momento afirmaron, sin ninguna evidencia, que en la Tierra hay extraterrestres caminando entre nosotros, o como otros tantos que han creado muchos de los llamados “productos milagro” que dicen poder sanar o curarlo casi todo, pero en realidad no curan ni protegen de nada, simplemente no funcionan, como las pulseras de ámbar, cuarzos o las orgonitas.
Uno de los engaños que en su momento fue muy difundido fue el fraude que decía que en el año 2012 habrá un cambio de polaridad en el planeta, el llamado “cambio de polos magnético”, que no fue más que otra vil campaña de desinformación, con muy evidentes ciberterroristas enfocados a causar temor e incertidumbre entre las personas, y que como todos podemos constatar no ocurrió nada. El temor es la mayor herramienta para causar las muy conocidas compras de pánico que tantas ganancias dejan a estos mercaderes de la desinformación, pero también pueden causar muchas tragedias.
Los timadores decían: “El cambio de polos por ningún motivo tomará a nadie por sorpresa , ya que para los habitantes del hemisferio norte será precedido por 3 días de oscuridad... Estas volteretas de la Tierra serán provocadas por la presencia cercana del Planeta X, el cual, siendo un imán gigante, su polo norte empuja hacia afuera al polo norte de la Tierra... ”; pero todo fue un vil fraude, una estafa pues como ya se sabe, el “Planeta X”, ya sea que le quieran decir Nibiru o Hercolobus no existen, todo eso es falso.
Es innegable que mucho influye el aspecto intelectual y cultural de las personas en esto, ya que tanto hay personas de escasos recursos que se creen los engaños de la mistificación, como personas de nivel socio-económico alto que son fieles creyente de estos fraudes. La ignorancia e incultura no distingue clases sociales. 
Otro engaño que se quiere poner de moda es eso de que los eclipses o las tormentas solares pueden provocar sismos; pero las evidencias, constatables y corroborables, señalan claramente todo lo contrario. El campo magnético de la Tierra nos protege de la gran mayoría de las partículas que salen del Sol cuando presenta esas explosiones llamadas tormentas solares o fulguraciones, las denominadas emanaciones de masa coronal, estas a veces pueden llegar a afectar las redes de telecomunicaciones, pero es imposible que afecte a las placas tectónicas del subsuelo. Por otro lado, la fuerza gravitacional ejercida por la Luna que puede afectar la marea de los océanos, no es para nada significativa para afectar de alguna manera el proceso de movimiento de las placas tectónicas, que son mucho más densas y pesadas.
Aunque algunos estafadores utilizan datos de la NASA, o que dicen que son de esta institución, para darle “más peso” sus “argumentos”, las cosas no concuerdan si se verifican. Al año ocurren unos mil temblores, cientos de tormentas solares de distinta intensidad, y unos 3 o 4 eclipses; pero los timadores quieren atinarle a algún sismo que corresponda con la fecha de un eclipse o tormenta solar, y con ello justifican sus “predicciones”. Otros charlatanes aseguran que el paso de los cometas o asteroides afectan en las mareas de los océanos o placas tectónicas, algo que también es completamente falso, pues su masa es muchísimo más pequeña que la de nuestro planeta.
Es como si jugarán en algún tipo de competencia para ver quien es más farsante o negacionista, al negar las evidencias brindadas por pruebas hechas a las evidencias que arrojan información que sí es sustentable y verificable por todo mundo y de forma libre, por lo que no estamos hablando de alguna creencia o especulación, sino que estamos tratando de información certera y confiable, no como lo que esos nefastos individuos dicen.
Hay que saber pensar, no porque algo salga en internet, no es necesariamente cierto, hay que documentarse más y mejor, no irnos con lo primero que encontremos y que nos parezca sorprendente y/o interesante, pues esas “teorías” (que no llegan ni a hipótesis) son de muy dudosa procedencia, y prácticamente de nula veracidad.
En estos temas de corte científicos, no gana el que grite más fuerte y más veces, gana el que demuestre con evidencia sustentable sus argumentos, y que pase la prueba de verificidad de todos los demás. Si los demás pueden descartarlo, entonces no es cierto. Siendo honestos, así debe de ser.
Debemos de colaborar en la desmitificación de esos falsos mitos modernos que pueden afectar y dañar a las personas. Tenemos que contrarrestar todo ese movimiento neo-oscurantista que ha invadido los medios de comunicación y las redes sociales. Una creencia o suposición no puede estar por encima de una evidencia comprobada, una mentira nunca debe de estar por encima de información verificada.
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