Para el segundo día teníamos previsto la visita a Akihabara, una visita muy esperada por muchos, entre los cuales me incluyo. Ese día no costo mucho levantarnos ya que todos estábamos impacientes por empezar a visitar Tokyo.
Akihabara (11/08/12)
Salimos del hotel andando hacia Akihabara, ya que nuestro hotel estaba a unos 10 minutos largos andando del centro de Akiba. Empezamos por la calle principal, donde indique las tiendas que no se podían perder y en las cuales podrían encontrar lo que buscaban. Luego nos dirigimos hacia Yodobashi Akiba, ya que es la tienda que mas pronto abre en la zona. Allí ya empece a dejar tiempo libre para que la gente del grupo pudiera ver lo que le interesaba de esta enorme tienda.
Después de la visita a Yodobashi, deje un tiempo libre para que cada uno explorara la zona a su gusto y quedamos para la 1 en el el Excelsior cafe de la plaza de al lado de la estación de Akihabara. Yo por mi parte visite el Book Off para buscar los mangas de Naruto para mi colección y comprar una PS2 de segunda mano para un amigo. Después me dirigí a Super Potato para comprar unos encargos que me habían pedido: varios juegos de Ps2 que no salieron en Europa y un Akumajô Dracula (Castlevania) de MSX2 . También pude dar un rápido vistazo al nuevo centro comercial de Akiba, el “Akiba Cultures Zone” donde encontré algunos muñecos de Bakuman.
Akiba Cultures Zone (11/08/12)
En eso se me fue la mañana y ya eran casi la 1 del mediodía, así que fui hacia el punto donde habíamos quedado con el grupo. Cuando el grupo se reunió y todos se habían enseñado lo que se habían comprado en la zona, nos fuimos a comer a un Yoshinoya al lado del Yodobashi. Algo de comida rápida para seguir nuestra visita hacia el templo de Kanda Myojin.
Templo Kanda Myojin
El templo de Kanda fue el primer templo de Tokyo que vimos y para la gran mayoría el primer templo japones que veían. Después de la visita volvimos al centro de Akihabara, algunos decidieron volver al hotel y descansar para la cena y otros nos quedamos un par de horas mas en la zona para terminar de mirar y comprar. Yo aproveche para visitar algunas tiendas que no me había dado tiempo a ver y entre ellas la tienda de Kotobukiya. Por el camino me fui encontrando con algunos del grupo, la mayoría volvían al hotel con lo que al final solo tuve que encontrarme con Alfonso en Akihabara para volver al hotel.
Calles de Akihabara (11/08/12)
Después de una merecida ducha emprendimos el camino hacia Shibuya, donde habíamos quedado con mi amigo Ryohei para hacer una cena con varios amigos suyos, de los cuales conocía a algunos como a mi amigo Shigetoshi, a unas chicas que estuvieron el pasado mes de Abril en mi casa o gente que conocí en la cena que hicimos el año pasado, pero no los conocía a todos. Al final eramos 10 japoneses y 8 españoles. Fuimos a un Izakaya donde nos mezclamos un poco para que todo el mundo pudieran entablar conversación y pasarlo bien. Cabe decir que la gran mayoría de japoneses que vinieron estaban interesados en España, hablaban español o incluso habían estado viviendo y estudiando en España.
La cena
Fue muy divertido ,comimos y bebimos bastante bien. Teníamos barra libre de bebidas y comida por 2 horas, así que podéis imaginar como empezamos la noche. Después de que se nos acabara el tiempo en el Izakaya nos fuimos a un karaoke. Aquí perdimos a algunos japoneses que vivían lejos de la zona y que decidieron volver a casa antes de los últimos trenes de la noche. En el karaoke solo estuvimos una hora y no dio para mucho, yo solo recuerdo haber cantado una canción, “Minority” de Green day con un japones que la puso con la esperanza de que alguien mas la supiera. Después lo di todo con la pandereta en las siguientes canciones (^_^) .
Al acabar el karaoke la mitad de nuestro grupo decidió volver en taxi al hotel, como consiguieron llenarlo no les resulto muy caro. El resto decidimos quedarnos hasta el primer tren de la mañana, así que fuimos para el centro de Shibuya, a Gas Panic. Una pequeñísima discoteca-pub que no pedía entrada pero si consumicion. Pensé que quizá seria una primera parada pero nos quedamos allí hasta el primer tren.
De allí recuerdo pequeños flashes, de como Jorge se convirtió en el alma de la fiesta, de que cuando nos hacíamos una foto se nos acoplaba gente o de como bebimos champan a morro y algunos fueron regados con el. Resumiendo, lo pasamos muy bien. A la vuelta subimos la calle del hotel andando por el medio y haciendo un poco de ruido y nos fuimos a dormir sobre las 6 de la mañana con la esperanza de podernos levantar antes de las 11, que era la hora a la que habíamos quedado con el resto del grupo para seguir nuestro itinerario, en mi caso tenia que estar un poco antes para procurar que a nadie se le pegaran las sabanas.
Ese día seguramente fue el mejor del viaje, al menos para mi. Fue una buena forma de empezar nuestro viaje, ya que entre la cena y la fiesta posterior pudimos conocernos mejor entre nosotros y entablar mas relación.