Viernes 9 de abril. Hoy me he olvidado de hacer la foto pero ya en casa tengo los resultados de mi salida de hoy: Kumquats que me ha regalado mi amigo Carlos Megido y que van a enriquecer una ensalada gloriosa este fin de semana.
Ha sido un momento de alborozo porque él me había hablado de estas naranjas enanas (sin saber decirme su nombre) que ha resultado ser el título de uno de los relatos que “endulzarán” el libro que preparo (sin yo haberlo sospechado). Esto nos ha dado pie para hablar de raros frutos literarios que nacen de insospechados árboles que nos han hecho chuparnos los dedos. Cosas de los encuentros que produce la bici.