Hola…
A unas pocas horas de mi cita me di cuenta de que con el tiempo todo pasa, ahora mandarte mensaje ya no me hace sentir como antes y tú ya no eres aquel niño que conocí, del que me enamore tan perdidamente, todo paso rápido y aún es un poco confuso para mi, creo que hasta podría jurar que precisamente por la rapidez con la que ocurrieron las cosas sigo sintiéndote dentro de mi piel como aquel escalofrío que dan en las madrugadas justo cuando la mañana comienza a nacer, o cuando el sol se esta metiendo dando paso al frío viento nocturno pero que nunca notas hasta cuando ya pasó hasta que ya es tarde.
Justo asi fue cuando salí y noté que era muy tarde para cubrirme de la lluvia que me habia alcansado, esta lluvia era diferente de la que me cubrio muchas veces estando junto a ti, era diferente no solo por que tú no estabas sino que todo lo pasado hacia que mi cabeza ni siquiera estuviera en el momento que estaba viviendo, esa agua era silenciosa, de esas lluvias que no se sienten, hasta que notas lo empapada que te dejan, hasta que sientes el agua salir de tus zapatos en cada paso que das y ahora asi la recordaré.
Jamas voy a olvidar esa agua calida que nos cubrio el día de ese beso, ni el agua fria y corriosa del dia que regresabamos de la escuela, ni siquiera era esa agua fria que me cubrio como un dulce despertar aquel día en que supe que todo se habia acabado, lluvias que me encantan por lo que fueron en ese momento, lluvias que jamas voy a olvidar.
Ojalá jamas olvides tampoco que fue agua fresca de nuestro verano y que aunque repitas escenas con diferentes protagonistas fui yo la que tatuo ese recuerdo en tu piel y en mi subconciente.
Disfruta el agua de cada lluvia de ahora en más, solo no corras por favor como un buen recuerdo de que un día viviste.