Eran muchos los sitios a los que quería ir este sábado. Entre ellos varios pueblos cercanos, pero como papi es un urbanita y era su día, la mejor opción me pareció Toledo para ir a pasar el día.
En Toledo yo he estado de pequeña con el cole y al principio de ser novios papi y yo y de todo esto hacia ya unos cuantos añitos.
Sabía que era bonito, pero se me había olvidado cuanto.
Al llegar allí, conseguimos aparcar a la entrada del casco histórico y con julito en la mano pusimos rumbo a subir esas cuestas que tiene la ciudad.
Un horror intentar andar mas de tres pasos con julito de la mano. Que calor¡¡julito se nos iba para todos los lados, si le cogiamos se retorcía, nos costo lo nuestro llegar hasta arriba.
Una vez llegamos, pasamos a un bar a cambiarle el pañal ya que tenía caca y cuando salimos se pego el golpetazo.
Se callo de bruces, puso las manos, pero se comió el suelo lleno de piedras.
El susto, fue enorme, toda la boca llena de sangre y julito, claro esta, llorando sin parar. Afortunadamente cuando pudimos limpiar la sangre, vimos que eran unos raspones en el labio, le pusimos hielo, y todo quedo en un susto, pero vaya susto¡¡¡
Yo ya había preguntando y todo por un hospital cercano para llevarle.
Despues del soponcio nos fuimos a dar de comer a Julito, el cual cuando se le paso el susto, pidió de comer.
Una vez julito comió, agarro una vaca de peluche que le acabamos de comprar y se quedo frito en dos segundos.
Mientras, como todos los restaurantes estaban llenos de gente, aprovechamos papi y yo para ver el Alcazar.
Alcazar, el cual yo recordaba muy diferente. Han hecho una pedazo obra y lo han convertido en un pedazo museo. El patio que es lo que yo recordaba que me gustaba estaba cerrado al público.
Dos horas después y con julito ya despierto nos fuimos al Mc Donals a comer nosotros y a merendar julito. Bueno mas bien a comer julito por segunda vez, porque yo que la había comprado dos petits para merendar, me quede flipada cuando vi que se comía mis nuggets y patatas además de los petits. Como hemos disfrutado viendo como disfrutaba el comiendo patatas fritas a dos carrillos¡¡¡
La sinagoga y la judería que quería ver papi la hemos cambiado por una tarde de parque para julito.
Como no hacerlo, cuando despues de desobedecer y no querer darnos la mano, o patalear al cogerle y decirle que se ha quedado sin parque por portarse mal, te viene te da besos y abrazos y te dice "un ratito parque". Nos tiene dominados...
Tras el parque, muy chulo por cierto, acostumbrada a la caca de parque que le llevo yo al lado de casa, nos hemos ido de vuelta a casa.
Y como a vuelto a hacer de las suyas, retorciéndose en el paso de cebra que había para cruzar al coche se ha quedado sin Mickey Mouse ni canciones en el viaje.
Ha ido todo el camino muy digno el, enfadado y sin decir ni una palabra.
Al llegar a casa, del camino del coche a casa, ha ido andando perfectamente.
Despues de cenar ha caído agotado y se ha dormido en un plis. Veremos cuantas veces se despierta esta noche.
Quitando el susto del golpe que se ha dado Julito, ha sido un día muy chulo.
Me da pena que papi se haya quedado sin ver las cosas que quería, y hayamos visto solo lo que quería yo que ha resultado ser un rollete.
Volveremos.