Uno de los choques entre explotados y explotadores, ocurrió el 1° de mayo de 1886 en Chicago. Este día, miles de trabajadores abandonaron sus labores para proclamar las ocho horas de trabajo. El mitin fue disuelto por la policía y posteriormente fueron ahorcados y ametrallados. Muchos líderes y obreros murieron para que los trabajadores dejaran de ser esclavos y se convirtieran en hombres libres, logrando jornadas de 8 horas y salarios más justos. En México, el obrero es libre gracias a las conquistas revolucionarias, organizadas por la fracción I del Artículo 123 de la Constitución de 1917, que hay nos rige. El 1 de mayo se realiza un desfile donde los trabajadores participan y festejan el día del trabajo.