Hoy es el día mundial del Síndrome de Down. La fecha no es casual, y es que hoy es el 21-3, que nos recuerda la triplicación del cromosoma 21, llamado comunmente Síndrome de Down (técnicamente no todas las personas con síndrome de Down tienen tres copias de dicho cromosoma, pero sí la mayoría).
Hace muchos años, cuando no se tenía ningún conocimiento de ellos, se creía que tenían una enfermedad y que no podían hacer nada, por lo tanto no se les enseñaba y se los ocultaba.
Por suerte esto fue cambiando y hoy en día se sabe que esta trisomía no es una enfermedad, sino es una condición de vida. Y se ha demostrado que con una buena estimulación, trabajo terapéutico, controles médicos, y sobre todo dándoles las oportunidades de poder demostrar que sí pueden, podrán atravesar grandes desafío y lograr cosas inimaginables para muchas personas.
Pero lamentablemente en muchos lugares se los sigue asociando con las personas que hacen las cosas mal, que no pueden aprender, que llegan a un punto y no avanzan, que son eternos infantes, que no tienen razonamiento, que no hablan, que no pueden relacionarse, que no… que no…. que no…
Es necesario poder cambiar esta opinión y que la gente sepa que si se las trata como se debe, pueden crecer sanamente, estar escolarizados, hacer deportes, actividades artísticas, estudiar en la universidad, divertirse, tener amigos, parejas, trabajo y una vida social como cualquiera. Pero todo esto lo pueden lograr sólo si tienen primero una familia y luego una sociedad que los incluye, respeta, valora y acepta tal como son.
En este día ayudemos a comunicar a la gente que no los ignore más, que deje de cruzar la calle cuando los ve, o dar vuelta la cara porque no sabe que hacer. Y sobre todo, que deje de dar el pésame a las familias que acaban de tener un hijo con síndrome de down, porque no es una desgracia, al contrario ha nacido un bebe y hay que felicitarlos. Con buena información, se los puede ayudar a salir adelante y tener una familia feliz.