Creedme si os digo que mi estado de estupefacción es superlativo al ver a Diane Kruger de Dior en la despedida del Festival de Cannes.
Si el primer día del festival nos sorprendía con un vestido vaporoso y ligero, en la clausura ha optado por todo lo contrario.
Un vestido que nos recuerda a los de la corte francesa de Luis XVI armado con miriñaque de la colección primavera-verano 2012 .
Sé que este vestido no dejará indiferente a nadie. Arrancará pasiones y desprecios a partes iguales.Lo que es indiscutible es que la alemana ha dejado huella en el festival.