Título: Diario
Autora: Ana Frank
Año: 1947
Género: Diario personal, autobiografía
Editorial: Debolsillo
Páginas: 384
Oculta con su familia y otra familia judía (los Van Daan), en una buhardilla de unos almacenes de Ámsterdam durante la ocupación nazi de Holanda. Ana Frankcon trece años, cuenta en su diario, al que llamó «Kitty», la vida del grupo. Ayudados por varios empleados de la oficina, permanecieron durante más de dos años en el ac hterhuis (conocido como «el anexo secreto») hasta que, finalmente, fueron delatados y detenidos. Ana escribió un diario entre el 12 de junio de 1942 y el 1 de agosto de 1944. El 4 de agosto de 1944, unos vecinos (se desconocen los nombres) delatan a los ocho escondidos en "la casa de atrás". Además del Diario escribió varios cuentos que han sido publicados paulatinamente desde 1960. Su hermana, Margot Frank también escribió un diario, pero nunca se encontró ningún rastro de éste. Después de permanecer durante un tiempo en los campos de concentración de Westerbork en Holanda y Auschwitzen Polonia, Ana y su hermana mayor, Margot, fueron deportadas a Bergen-Belsen, donde ambas murieron durante una epidemia de tifus entre finales de febrero y mediados de marzo de 1945 (el tifus fue causado por la extrema falta de higiene en el campo de concentración). Edith Holländer (madre de Margot y Ana) muere de inanición en el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau. Hermann Van Pels (uno de los ocho escondidos) fue enviado el 6 de septiembre de 1944 a las cámaras de gas de Auschwitz, donde muere semanas más tarde. Su esposa, Auguste Van Pels, muere a mediados de abril de 1945 en el campo de concentración de Theresienstadt. Peter Van Pels muere el 5 de mayo de 1945, tres días antes de la liberación. En cuánto a Fritz Pfeffer, murió en el campo de concentración de Neuengamme, el 20 de diciembre de 1944. El diario se publica por primera vez bajo el título Het Achterhuis (la casa de atrás) en Holanda, en 1947, por el editor Contact. En abril de 1955 se publica la primera traducción al español con el título Las habitaciones de atrás (editorial Garbo, Barcelona). Así pues el Diario de Ana Frank es un testimonio único en su género sobre el horror y la barbarie nazi, y sobre los sentimientos y experiencias de la propia Ana y sus acompañantes. Ana murió en el campo de Bergen-Belsen en marzo de 1945. Su Diario nunca morirá.
Opinión:
El diario de Ana Frank era uno de mis eternos pendientes y después de sufrir un bloqueo lector decidí no retrasarlo más así que me fui a la biblioteca de mi barrio y lo pillé. Creo que en cierto modo me vino bien tardar tanto en leerlo, creo que exige cierto grado de madurez aunque no es que sea un requisito necesario.
Es un poco absurdo que entre a mencionar la pluma de Ana o los ''personajes'' ya que lo que más impacta de la novela es que nos encontramos ante el diario de una judía en la alemania nazi. Nada es ficticio, por si alguien no lo sabe aunque lo dudo. Posiblemente si no hubiesen sido esa las circunstancias no le habrían publicado la novela porque me resultó demasiado plana, no creo que tuviese talento para esto y cuando narraba se iba por las ramas, aunque claro, volvemos a que es el diario de una niña y nadie busca ser nobel en esas circunstancias.
La lectura fue amena y logró ponerme la piel de gallina. Lo que más me fascina de leer sobre la II Guerra Mundial es que te suelen dar enfoques diferentes y Ana con su diario consiguió transmitirme esa claustrofobia y el pánico aunque lo encontrasen. No lo considero una lectura brillante, que nadie me mate, pero sí creo que debería ser una de esas lecturas obligatorias porque es sencilla y sirve para definir un poco mejor la clase de penurias por la que tuvieron que pasar los judíos.
Aún así no pude evitar tener algún que otro conflicto moral a lo largo de la novela. Ana no me cayó bien. no he simpatizado con ella, creo que estaba un poco mimada y tenía demasiada tontería encima para todo lo que estaban viviendo. Por otro lado los consideré bastantes afortunados porque tenían hasta regalos y claro, más rabia me daba ella.
Por otro lado lo que más me fascinó sin duda alguna fue la descripción de la casa. No soy muy fan de estas cosas pero pude imaginarme perfectamente como era y tuve unas ganas enormes de poder entrar y curiosearla, perderme por aquel armario y ver cómo vivían. Tuvo que ser muy duro estar ahí encerrado y no poder ni bajar.
Luego otra cosa que me encantó fue el final, tan abrupto. Si hubiesen añadido algo otras personas habría fastidiado todo ese toque personal que le caracterizaba.
No sé, es un libro que me gustó pero que tampoco es de mis favoritos ni de los mejores sobre este tema, aún así me parece una buena lectura y una forma de tener otra visión e incluso de transportarte a esa casa de atrás y a sufrir el pánico que tenían ellos.