Hoy vengo con una reflexión sobre las modas literarias. ¿Qué son, por qué existen? Y creo que la más importante... ¿hasta qué punto debemos seguirlas?
Si te interesa, ya sabes, coge un té y unas galletas, y vamos a charlar.
Las modas literarias han existido siempre. Ya en el renacimiento e incluso en la edad media, los autores, dramaturgos y escritores de toda clase se veían en la necesidad de plegar su arte a las corrientes del momento, para así complacer al máximo de personas, en especial a sus mecenas o protectores.
Hoy ya no estamos en le renacimiento, y no hay mecenas... al menos, no como antes. Pero lo cierto es que las modas siguen influenciando en la literatura.Por un lado, las editoriales escanean las modas del momento, de manera que un libro que encaje tendrá más posibilidades de ser publicado, y, más importante aún, promocionado con los recursos de la empresa. Es tan simple como que algo se está vendiendo mucho, así que se pueden sumar más productos hasta que la veta (la moda) se agote (cosa que pasará tarde o temprano).En ese sentido tampoco se puede apuntar a la editorial, que no deja de ser un negocio, y va a buscar la rentabilidad máxima. ¿Son las editoriales las que impulsan una moda? No. Somos los lectores. Todas las personas tenemos la tendencia de ir a por las cosas que nos gustan, y si un libro nos ha gustado, ¿por qué no leer otro parecido?Sin ir más lejos, yo soy una gran fan de las novelas románticas, y no podemos negar que hay un nutrido número de ellas que son muy parecidas entre sí. Por suerte, mi escritora romántica favorita es Nora Roberts, y entre sus novelas puedes encontrar algunas típicas, sí, pero las que más me gustan son las que tienen el romance en paralelo con la historia: el argumento no es el amor.Pero de todos modos no creo que la novela romántica sea una moda como tal, sino algo más prolongado en el tiempo. Podría decirse que es un nicho, un conjunto de obras con unas características muy parecidas (a menudo, calcadas), y que, bueno, ahí están.Las modas, en cambio, pasan. Hemos tenido la moda de los vampiros, la moda de los tríos adolescentes, o la de los ángeles. Y mi siguiente pregunta es... ¿de dónde salieron las muchas novelas de cada una de ellas? ¿Los escritores tenían esas ideas y las aprovecharon... o aprovecharon la moda y exprimieron una historia que encajara?Puedo decir que Lazos de Sangre nació, se escribió y se publicó mientras la moda de los vampiros seguía viva. Es posible que hubiera una cierta influencia... aunque se separa bastante del patrón: ambos son vampiros, además son dos hombres, la relación es LGTBI, y trata temas como el abuso sexual, y de manera bastante cruda.
En conjunto, la cuestión es la siguiente... ¿Debemos, como escritores, amoldarnos a las modas?
En lo personal, creo que no. Está bien aprovechar una si tienes esa historia en el cajón, ¿por qué no? Pero tu historia es algo tuyo. Intentar colocarla en un molde específico solo porque es lo que se lleva ahora... esa obra que vas a escribir no será tan buena como si la dejas libre.
¿Y tú qué opinas?