Revista Cine
Virgen Santa, qué tostón. La bajada de calidad en los 'Clásicos' ha sido lenta, suave y sutil, de forma que sin darme cuenta me doy de bruces con este bodriete. Aquí poco hay que defender. La animación es fantástica, claro, pero en plena era 2000 eso ya no puede ser una virtud, sino algo exigible. Por otro lado, las canciones son aceptables (aunque innecesarias) y alguna hasta pegadiza. De hecho, gracias a la banda sonora el momento de la transformación mola. Todo lo demás a la basura. Estamos ante un film dolorosamente típico y obvio, donde todo resulta forzado y formulario. Y los personajes no pueden tener menos carisma. Ojo a como el prota pasa de niñato repelente a niñato soso y olvidable. Brillante evolución GRACIAS AL PODER DEL AMOR o algo. Bah, no me apetece ni hacer bromas.
Terminaré resaltando los lamentables secundarios cómicos que son los alces. Es que ni se han molestado en relacionarlos de forma natural con la historia del protagonista: Están en otra película, directamente. Una sin gracia alguna.
En fin. Que es de las peores. Y sospecho que parecerá un Obra Maestra al lado de las dos siguientes... Si muero, recordadme como un héroe.