No es casualidad que no hayamos escrito nada en todo este tiempo.
Coordinar la casa de acogida es un trabajo a tiempo completo. Tenemos dos cuidadoras que se turnan para cuidar a los bebés y el resto de niños, 20, es cosa nuestra. Esto implica gestinar la ropa, comida, tiempo de recreo, actividades, doctores, medicinas, responsabilidades de los niños y un largo etcétera.
Nos hemos visto arrastrados por un sin fin de tareas y responsabilidades. Durante el día todo es por y para los niños. No hay tiempo de descansos, ni paseos, ni ir a tomar algo…
Entonces nos paramos a reflexionar. Está claro que este ritmo es agotador, no favorece ni a los niños ni a nosotros. Los pocos días de descanso que tenemos no son suficientes.
Vamos a ver las diferentes opciones que hay para solucionarlo, ¡seguro que encontramos alguna forma!
Xavi y Gemma