Típica película de los 80, destinada a las fans del ídolo del momento, en este caso Tom Cruise, que rellenaban carpetas con sus fotos; o de los locos de la velocidad, con las carreras de la Nascar. Cierto es, que tiene sus momentos de adrenalina, pero es que ese guión horripilante, cuando no hay coches de por medio, lo echa todo por tierra, y el americanismo extremo roza lo vergonzoso.
Mi Puntuación: 4.9