Días extraños

Esta fin de semana ha sido un poco extraño, marcado por el fallecimiento del padre de alguien cercano a nosotros y por un gran día en familia. Es curioso como la vida solapa los acontecimientos.
El domingo después de asistir al sepelio, nos fuimos de aventura familiar. No sabíamos bien donde íbamos, pero habíamos preparado bañador, zapatillas para río, toallas, etc.

Aunque el plan no estaba definido, sí que sabíamos que algo teníamos que hacer mar, río, pantano...

Al final nos decantamos por el embalse de Sitjar a unos 15km de Castellón. Es una embalse bastante grande, y muy conocido por su intenso color turquesa. Si tenéis la oportunidad de visitarlo hacedlo, os sorprenderá el color que tiene. Por desgracia, las fotos no reflejan toda la intensidad, lo mejor es verlo en directo.

Comimos por allí en una de las mesas de cemento que ya hay preparadas en el paraje y después nos fuimos al agua. Estuvimos un buen rato, y gracias a mamacangreja, encontramos una calita donde no había nadie, y donde la orilla no era tan fangosa y se estaba de maravilla.

Lo cierto es que hemos encontrado un sitio al que vamos a volver más de una y de dos veces. De hecho, la próxima vez que vayamos reservaré un kayak para recorrer el embalse con cangrejito, si es que quiere, porque el agua y él no se llevan demasiado bien.

Pero como las cosas son como son, el lunes nos despertamos con una lluvia de ceniza sobre la ciudad. A unos 20 0 25 kilómetros de Castellón en Artana, se había iniciado un fuego muy cerca del paraje natural de Sierra de Espadán, muy cerca del embalse en el que pasamos el domingo.

Quizás haya unos 15km de distancia entre el embalse y el incendio, pero hoy, miércoles, todavía está ardiendo, y ya a entrado en el término municipal de Onda. 

Espero que lo controlen pronto porque ese parque natural es uno de los pulmones de la provincia. Ya nos hemos acostumbrado al sonido de los aviones sobrevolando la ciudad de manera continua, durante todo el día, en sus viajes al mar a por agua. Encima, en esos lugares que se apagan con agua del mar ¿qué puede crecer luego?