Durante la primera vuelta en las elecciones de 1990, el desconocido personaje obtuvo alrededor del 20% de los votos. Los historiadores creen que esto se debió a un inconformismo de gran parte del pueblo peruano con los políticos tradicionales y de derecha y porque además Fujimori se encontraba más cercano a los sectores bajos. Al final, Vargas Llosa, apoyado por los grupos de derecha y potencial ganador fue derrotado por aquel desconocido, llamado Alberto Fujimori, respaldado a su vez por los partidos de izquierda y moderados como el APRA. Así entonces Fujimori venció a Vargas Llosa llevándose casi el 60% de los votos.Solo en el Congreso el APRA y el FREDEMO (agrupación de Mario Vargas Llosa) llevaban la ventaja.
El Primer gobierno de Fujimori
El país que aquel inexperto había heredado estaba hecho pedazos. La economía estaba en ruinas, los grupos terroristas estaban rodeando la capital Lima y la pobreza no hacía más que aumentar. Fujimori no habría durado ni un solo año sin las pautas de sus asesores, tanto humanos como de instituciones políticas y financieras. La ONU, el FMI, Washington y Vladimiro Montesinos fueron los que rápidamente lo hicieron desligarse de aquella tendencia izquierdista y populista que aún podía quedar en él.
El caos del país hizo imposible un gobierno pacífico y las huelgas, manifestaciones, hambre, terror y miseria continuaron. Fujimori empieza a seguir un modelo económico liberal buscando reducir la hiperinflación algo que se conoció como el ajuste o fuji-shock. Además suprimió todos los subsidios y los dólares MUC del gobierno de García, se empezaron a privatizar algunas empresas públicas, como el teléfono y se lanzó una ofensiva militar y del servicio de inteligencia contra los grupos terroristas. La deuda externa mientras tanto se mantenía en unos 25 mil millones de dólares.
Ante la protesta de sus enemigos políticos, Fujimori decide actuar rápido y disuelve el Congreso el 5 de abril de 1992 temporalmente (a esto se llamó Crisis constitucional), con el fin de que se cree una Nueva Constitución con un cuerpo totalmente nuevo; además, claro, porque sentía que sus contendientes políticos lo sometían a presión desde el legislativo compuesto en su mayoría por representantes del APRA y FREDEMO.
Ese mismo año, los militares intentaron un golpe de estado, pero Fujimori, temeroso de que lo asesinen, se refugió en la embajada de Japón y más tarde apresó a los líderes que intentaron la revuelta. En el nuevo Congreso convocado en noviembre de 1992, el partido Cambio 90 resultó ganador por mayoría. Sin embargo, ¿por qué los militares y el pueblo eran tan permisivos con tales acciones? Simple. En 1992, en mayo y septiembre respectivamente, caen los líderes del MRTA y Sendero Luminoso; Victor Polay Campos y Abimael Guzmán. La represión contra el terrorismo había sido igual de veraz, en especial en las zonas rurales donde se cometió genocidio contra inocentes, al igual que en el caso de Barrios Altos, en Lima.
Tampoco debemos olvidar las universidades como San Marcos y La Cantuta, nidos de ideología comunista radical, que tuvieron que ser limpiadas a diestra y siniestra. Sin embargo, estas purgas también se cobrarían la vida de personas inocentes.
Estos hechos fueron tapados a la opinión pública y no se conocieron hasta años después. Fujimori ganaría así la fe y el apoyo de gran parte de la población. Por ello continuaría en el poder llevándose toda la gloria. Finalmente, en octubre de 1993 ratifica la Constitución mediante un referéndum. Así surge el congreso unicameral integrado por 120 individuos. Se declaró la pena de muerte por terrorismo y traición a la patria; se reformó el sistema electoral, entre otras medidas.
Otro de sus importantes logros políticos fue dirigir la Guerra del Cenepa con el Ecuador, país con el cual se firmó un tratado amistoso y limítrofe años después, y que es respetado hasta hoy en día.
Segundo gobierno de Fujimori
Para 1995 la economía del país había mejorado increíblemente, aunque aún quedaba bastante por hacer. Sin embargo, Fujimori era ya una figura conocida a nivel mundial. Su popularidad era bastante grande y eso le permitió vencer a Pérez de Cuellar en las nuevas elecciones. Pero no todo era color de rosa y en aquél gobierno de Fujimori ya se vislumbraba cierta corrupción, por ejemplo, con la mención de aquella ley de interpretación auténtica la cual le permitía la reelección en el año 2000. Entre los aspectos más importantes de su segundo gobierno podemos señalar la derrota del MRTA luego de que tomasen por asalto la casa del embajador del Japón.
Sin embargo, la corrupción del gobierno se hizo cada vez mayor, controlando los medios de comunicación y empresas de todo el país para que sean favorables al gobierno. Fujimori intentó ser reelegido por tercera vez en el año 2000 y eso marcó su destino. A este dictador democrático le quedaba poco tiempo en el poder.
Fin de la dictadura y huida
En las elecciones del 2000 Fujimori le ganó a Alejandro Toledo, sin embargo, al no alcanzar mayoría absoluta, deben ir a segunda vuelta. Al final Toledo se retira por temor al fraude y Fujimori queda venciendo otra vez. Sin embargo, esto generó grandes brotes de protestas en muchas partes del país, alcanzando el punto máximo con la denominada Marcha de los Cuatro Suyos. El enfrentamiento entre fuerzas del orden y los civiles marcó el inicio del fin, aún más cuando el presidente no consiguió la mayoría en el Congreso. Finalmente, la corrupción del régimen quedó al desnudo cuando se emitió el primer “vladi-video”, en el que se ve al asesor presidencial otorgando dinero a muchos políticos, empresarios y famosos con el fin de tenerlos comprados; además, se comprobaron ciertos lazos del gobierno con el narcotráfico.
Ante esto, Fujimori da un mensaje a la nación y decide dar un paso al costado señalando la desactivación del SIN (servicio de inteligencia acusado de métodos represivos contra civiles), la destitución de Montesinos y la convocación a nuevas elecciones. Fujimori huye a Japón y renuncia vía fax desde allí, algo que no es aceptado por el Congreso. Como presidente provisional, se elige a Valentín Paniagua.
Exilio en Japón
Fujimori vivió en Japón después de solicitar asilo político y además porque gracias a sus padres consiguió la nacionalidad de dicho país. El gobierno de Tokio protegió a su ciudadano a capa y espada e ignoró los pedidos de extraditarlo que hizo el gobierno peruano y la Interpol. Para las elecciones del 2005, Fujimori reorganizó con sus seguidores el partido Cambio 90 bajo el nombre de Alianza para el Futuro. Marta Chávez postuló a la presidencia obteniendo alrededor de 1 millón de votos así como 13 curules en el Congreso.
Pero la suerte dejaría de sonreir a Fujimori. Con una inexplicable seguridad, el ex mandatario peruano arrivaría Chile el 6 de noviembre del 2005. Sin embargo, fue detenido al día siguiente por solicitud de la Embajada del Perú en Santiago. Así estuvo detenido hasta el 18 de mayo del 2006 cuando se le otorgó la libertad bajo fianza, pero con la condición de no permitirle salir del país. Fujimori además, usando su segunda nacionalidad, intenta postular al senado de Japón fracasando estrepitosamente. Finalmente, luego de procesos burocráticos que duraron meses, el 22 de septiembre del 2007, Fujimori retorna al Perú, siendo extraditado por orden de la Corte Suprema de Chile.
Los juicios
Se le acusó por allanamiento ilegal, el caso de Barrios Altos, La Cantuta, los crímenes perpetrados contra civiles en el SIN, entre otros. En diciembre de ese año se le condenó a ocho años de cárcel por abuso de autoridad, usurpación de funciones, entre otros cargos, como el de pagar una suma de casi medio millón de soles como reparación. Finamente debido a los casos de Barrios Altos y Cantuta, el 7 de abril del 2009 se le condenó a 25 años de cárcel. El 20 de julio se le dieron otros siete años más por cargos como el de apropiación de fondos (se cree que robó más de 500 millones) y falsedad ideológica en perjuicio del estado. En enero del 2010 su condena mayor, la de 25 años, fue corroborada por haber violado los Derechos Humanos. Fujimori se convierte así en el primer presidente en la historia del Perú en ser enjuiciado y llevado a la cárcel.
En su tiempo en la cárcel ha sido internado y atendido por varios especialistas. Entre algunas anécdotas actuales podemos señalar la que sucedió en enero del 2010, cuando tuvo el atrevimiento de realizar en la misma cárcel el casamiento de su hija Sachie Fujimori. ¿Será el último capítulo en la vida del ex-presidente?, ¿o es que acaso se está aún por escribir?