Todo se trataba de una broma de mal gusto.
El joven llegó poco después a la Facultad para asistir a clases. Contó que tres días antes había extraviado su teléfono celular, desde donde habría surgido una comunicación que confundió a las autoridades de la casa de estudios.
Luego, la Facultad emitió una rectificación del primer comunicado:
A la comunidad de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNT,
Las autoridades de esta casa de estudios se dirigen a sus miembros a fin de rectificar la información, oportunamente difundida, acerca del estudiante Josué Marcos Lescano. Con muchísimo pesar se comunicó que el mismo había fallecido, en base a información que, en el transcurso de la jornada y por fortuna, se comprobó falsa cuando pudimos tomar contacto personal con el estudiante y su madre.
Las autoridades declaran su sorpresa y profundo desagrado por la manipulación a la que fue sometida nuestra comunidad, especialmente sus compañeros y compañeras que actuaron de buena fe en todo momento.
Exhortamos a un uso responsable de las redes sociales para evitar situaciones tan lamentables.
