El alto contenido de proteínas de las dietas bajas en hidratos de carbono, a las que muchas personas recurren para perder peso, podría ocasionar problemas de colon a largo plazo, o al menos esto se desprende de un primer estudio realizado con un número reducido de hombres obesos.
Para el estudio los investigadores británicos contaron con la participación de 17 hombres obesos y se centraron sólo en los cambios a corto plazo de ciertos compuestos que son subproductos del metabolismo, y no el riesgo real de enfermedades del colon, por tanto tampoco debe cundir la alarma.
Sin embargo, recomiendan asegurarse de que cualquier plan para bajar de peso que vayamos a seguir incluya cantidades adecuadas de fibra. Además hay que tener en cuenta que un consumo elevado de proteínas durante meses o años podría tener efectos negativos en el colon.
Como comentaba, los resultados del estudio se basan en 17 hombres obesos que siguieron tres dietas a corto plazo: un plan de menú de una semana diseñado para mantener el peso; una dieta de cuatro semanas rica en proteínas con cantidades moderadas de hidratos de carbono; y una dieta de cuatro semanas alta en proteínas y baja en carbohidratos.
La primera dieta, que permitía unos 360 gramos de carbohidratos por día, ofreciendo por lo general cereal, huevos y tostadas para el desayuno, un sándwich y una ensalada para el almuerzo, y pollo, pescado o soja, junto con la pasta, para la cena.
La dieta baja en hidratos de carbono – que permitió tan sólo 22 gramos de carbohidratos cada día – por lo general consistió en un desayuno de huevos con bacon, con almuerzos y cenas ricos en carne, las aves de corral y pescado, junto con algunas verduras y queso.
La dieta moderada en carbohidratos permitió 181 gramos de carbohidratos cada día. Ambas dietas ricas en proteínas contenían poco menos de 140 gramos de proteína por día.
Al final de cada período de dieta, el equipo de investigación analizó muestras fecales de los hombres para mirar los niveles de determinados subproductos metabólicos. En la dietas ricas en proteínas tenían niveles más altos de sustancias ligadas al cáncer, y cuando ademas eran bajas en carbohidratos se reducían las concentraciones de derivados de la fibra, que se considera que protegen contra el cáncer.
En resumen, las personas que buscan perder peso deben asegurarse de consumir suficiente fibra en su dieta. En general, los expertos recomiendan que los adultos consuman alrededor de 28 gramos de fibra por día.
Visto en ajcn.org
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