Diez ingredientes para ser feliz

“Podemos ser felices aquí y ahora. Si escribiéramos todas las cosas que ya tenemos por las que alegrarnos, no tendríamos suficiente con diez páginas” (Thich Nhat Hanh)

A veces, el secreto de la felicidad no se encuentra a pesar de tener cosas o en hacer lo correcto. A veces se trata de dónde estemos, de con quién, de las pequeñas decisiones que tomemos, de nuestra actitud frente a los problemas o de nuestra determinación. Según Sonja Lyubomirsky, profesora de la Universidad de California, las diez cosas necesarias para tener una vida plena, son:

1. Mostrar gratitud: hay que valorar lo que tenemos. Ser agradecido y pensar en aquellas cosas buenas que tenemos o que nos han pasado, es fundamental para sentirse bien, reforzar el autoestima o valorar más las experiencias positivas.

2. Cultivar el optimismo: Lyubomirsky habla de “El diario del mejor imposible“, que consiste en escribir cómo nos gustaría ser en el futuro sin concentrarse en los bienes materiales sino en valores o comportamientos que nos gustaría tener en el futuro (tener más paciencia, sonreír cada día, esforzarme por ser mejor…)

3. Evitar darle vueltas a las cosas y las comparaciones sociales: compararnos con los demás no solo es inútil, sino que resulta insano: si nos creemos mejores, es un sentido de superioridad que puede afectar a nuestra manera de ver la realidad y de interactuar con los demás; si nos consideramos peores, desmerecemos los pequeños progresos y avances que consigamos. El reto, según Lyubomirsky, es ser la mejor expresión de nosotros mismos y distraer los pensamientos negativos a golpe de recuerdos bonitos o imágenes/canciones/objetos que nos reporten un poco de paz.

4. Ser amables: ser generosos y atentos, aunque sea en pequeños gestos como dar los buenos días o sujetar una puerta, puede ayudarnos a ser más felices, de igual modo que si nos rodeamos de gente agradable, reducimos el estrés. Al final todo es una cadena, y cuesta tan poco ser amable…

5. Cuidar las relaciones sociales: dedicar tiempo a comunicarnos con los demás es fundamental. La amistad es una de las grandes cosas positivas de nuestra vida. Las redes sociales están bien, pero salir a tomar una cerveza con alguien a quien apreciamos o llamar a ese amigo con el que hace tiempo que no hablamos, mucho mejor.

6. Desarrollar estrategias de afrontamiento: una de las cosas que más nos cueta a las personas es afrontar aquellos acontecimientos inevitables de nuestra vida que nos causan dolor, miedo o estrés. Negar todos esos sentimientos sólo provocará más conflicto con nuestro alrededor, y por ello Lyubomirsky considera fundamental expresar lo que nos duele, por medio de una conversación o de una expresión artística, para materializarlo y enfrentarlo.

7. Aprender a perdonar: perdonar nos libera. Parece difícil en ocasiones no guardar rencor, pero realmente, al perdonar, liberamos un peso muy importante de emociones negativas y un aumento de autoestima.

8. Saborear las alegrías de la vida: están ahí, pero no siempre las vemos. Las cosas buenas o las épocas de estabilidad, no duran siempre. Por ello, es importante saborearlas al máximo: celebrar un éxito, rememorar situaciones positivas o festejar las buenas noticias es una manera de disfrutar de esas alegrías cotidianas que, a veces, ignoramos.

9. Comprometerse con los objetivos: tenemos que escoger objetivos lo suficientemente flexibles y alcanzables (aunque sean pequeños, y después tengamos que plantearnos otros objetivos nuevos), para no sentirnos frustrados. Y, por supuesto, el compromiso no significa obsesión y, por tanto, también tenemos que dejarnos sorprender un poco por la vida.

10. Cuidar el cuerpo: hacer un poco de deporte, comer sano, dormir las horas adecuadas o expresar emociones positivas con gestos como la sonrisa, son cosas que nos ayudan a sentirnos felices.