Diferentes tipos de cámaras para bicicletas

A las cámaras de aire de la bicicleta no siempre se le presta la atención que se debería. Escoger la cámara de aire adecuada tiene gran importancia y esto dependerá, fundamentalmente, del tipo de ciclismo que hagas así como del uso de la bici, etc, para así evitar posibles averías.

En algunos casos hay ciclistas que no seleccionan las cámaras de aire de la bici en función del tipo de ciclismo que practican o del terreno por el que van y acaban empeorando el rendimiento que tienen y sufrir, además, pinchazos. Con esta guía podrás escoger la cámara de bicicleta más correcta para tus ruedas.

Comprueba el diámetro de la rueda

El primer paso será comprobar el diámetro de la rueda, así como el ancho con el que cuenta el neumático. Tendrás que comprobar que coincide con el modelo de cámara. En el caso de las ruedas de bici MTB las pulgadas tendrán que ser de entre 29″, 27,5″ y 26″ de diámetro y de 1.7 a 3″ de ancho, en el supuesto de las bicicletas para las ruedas de carretera y gravel tendrán que ser desde 700c o 650B para el diámetro y de 23 a 45 mm en cuanto al ancho.

En cualquier caso debes tener en cuenta que hay un estándar universal que siguen la gran parte de los fabricantes y es el ISO-ERTRO, tratándose del mismo en todas las modalidades. Es un dato que está indicado en todos los modelos de cámara y puede serte de gran utilidad en el caso de que emplees para dos bicicletas de distinto uso como puede ser un modelo MTB y una gravel. Para comprobar el tamaño de la cámara adecuado tendrás que ver la medida ISO-ERTRO que encontrarás expresada a través de numeraciones como 47-584, 48-584, 50-584, entre otros.

¿Puedo poner una cámara de 27,5″ en una rueda de 29″?

En cuanto al tamaño de las cámaras siempre surge la duda de si se puede o no instalar una cámara más pequeña o más grande que el tamaño de la propia rueda. Pues bien, en un primer momento esto es algo que no se debería hacer. Si se escoge un modelo que sea más pequeño estará muy estirado y el riesgo de pinchazo o rotura sería mayor En el caso de que sea muy larga podría pellizcarse debido al mayor tamaño de la cámara con respecto a la llanta.

Así pues, si bien sí es posible instalarla, lo cierto es que solo habría que hacer algo así en caso de pinchazos o emergencia y de manera puntual.

Tipos de cámara de bicicleta

Respecto a los tipos de cámara de bicicleta que puedes encontrar en el mercado encontramos las siguientes opciones.

Cámaras de bicicleta clásicas

Las cámaras clásicas, por lo general, están hechas a base butilo, un tipo de caucho que es duradero y elástico capaz pudiendo estirarse ante la presión del aire. Es una cámara asequible que cuesta entre los 3 y 8 euros.

Cámaras reforzadas

Las cámaras reforzadas cuentan con un butilo de mayor grosor, lo que hace que sean modelos más resistentes ante cortes o pinchazos, pero pesan más. Se suelen en bicicletas de MTB, como Enduro o Descenso y en el caso de las bicicletas urbanas o eléctricas. El precio oscila entre 5 y 10 euros.

Las cámaras lineales se emplean en ruedas grandes o en cubiertas de gran grosor, como puede ser el caso de los modelos eléctricos o de Enduro. En este caso el precio puede ir entre los 5 y 15 euros.

Cámaras antipinchazos

Las cámaras antipinchazos son modelos normales que presentan líquido antipinchazos en su interior incorporado. Son modelos que pueden llegar a reparar por sí solas pinchazos de hasta 6 mm de grosor. Son modelos más pesados que las cámaras clásicas. El precio oscila entre 5 y 15 euros.

Respecto a los modelos de cámaras antipinchazos destacan las opciones realizadas por Foss que están conformadas a base de polímero termoplástico, un material que puede taponar el pinchazo y permitir que se acabe el trayecto con aire, aunque luego habrá que reparar el pinchazo de la rueda igualmente.

Cámaras de burbujas

Las cámaras de burbuja son cámaras antipinchazos reforzadas. Cuentan con una superficie jalonada con pequeños salientes o burbujas que protegen la rueda ante pellizcos. Cuentan en su interior con el líquido sellante. Los precios van desde los 5 a los 10 euros.