Aitor Gaisán, un viejo amigo, que no un amigo viejo, me comparte esta foto que encontró en cuantarazon.com, lo que aplicado en el día a día puede terminar en esto, o bien en esto.
Y les dejo una perla de mi hermano Jorge, que en la misma línea, para ayudar a sus amigos con problemas de acentuación, escribió en su muro:
"Para los que no tenéis nada claras las situaciones en las que se acentúa o no 'qué', 'quién', 'cómo', 'cuándo', 'dónde' y 'por qué'... llevan tilde cuando se les puede escribir 'cojones' justo después, haya o no (!) o (?) [signos de exclamación o de interrogación] en la frase. Pido perdón a mi mamá por decir palabrotas, es que la tengo en el Facebook."
Nada cambia si, dependiendo del país, se cambia 'cojones' por 'demonios', 'rayos', 'carajo' o 'huevos': cómo rayos, qué carajo, cuántos huevos. Cada uno sabrá guardar o no la compostura y aplicarla a su contexto de la manera más expresiva, pero siempre favorable.