Dile NO a la Discriminación de las Nanas

ay algo peor que la Discriminación? Sí, no hablar de ella. Cuando pensábamos que la esclavitud se había abolido saltan a la luz algunos ejemplos que nos señalan la pobreza espiritual de algunos chilenos, que para proteger sus “intereses” pasan por encima de todos, incluso de ellos mismos.

Olvidan quiénes fueron los que criaron y aguantaron a sus hijos. Las Nanas son una parte fundamental de la sociedad y por ello merecen el mejor de los respetos y valoración. Los últimos ejemplos que han mostrado los medios hablan de una discriminación total, haciendo comparar el uniforme con el grillete.

No basta con los abusos de interminables horas de trabajo o faltas de respeto, también había que denostar a quien les da de comer. Olvidan la importancia que una Nana tiene en la vida íntima de las personas. No agradecen su objetividad y capacidad de guardar los mejores secretos de las familias que a la vista de todos son “perfectas”. Lo tienen todo pero no tienen nada. De seguro muchos de aquellos discriminadores van a las iglesias los domingos para que el sermón les entre por un oído y les salga por el otro.

La Ropa Sucia se lava en casa, pero no olvides que alguien la lava.

Todos usamos los mismos modelos de riñones, pulmones, hígado, pero no de corazón. Siempre se habla de los logros económicos que alcanzan los países, pero ¿Y la riqueza espiritual?. Todos somos iguales, pero los medios económicos nos hacen elevarnos a un nivel donde se tiene la capacidad de mirar en menos a todo aquel que tiene menos o nada. El Olimpo económico sigue acumulando bienes, que muchas veces ni siquiera alcanzan a gastarse, salvo para solventar los vicios de los hijos que no trabajan. A lo mejor exagero, pero es por la molestia.