Dinero o felicidad

La riqueza no es lo más importante. Si nos aferramos a ella tal vez nos marchitemos, y perdamos el entusiasmo por otras cosas más ricas en la vida.
Buscar la felicidad en el dinero es un error. Sé que es algo que nos dicen desde pequeños y que la sociedad valora sobremanera. Te pasas la juventud estudiando para ser un hombre de provecho, para tener éxito, para ganar mucho dinero, para tener una casa, un coche, viajar y vivir desahogadamente. Y así vas creciendo y un días te miras al espejo y ves que has madurado muy rápido, sin apenas darte cuenta y aferrado a esta idea.
Y en ese momento te das cuenta de que las riquezas no son tu felicidad. En tu interior, deseas hacer lo que siempre habías querido, pero crees que ya es tarde, estás cansado. Y te engañas, y te dices que cuando estés jubilado lo harás. Pero aún así sabes que entonces tampoco será el momento, porque si ahora estás ya cansado, con diez años más serás ese anciano que viste en tu abuelo o después en tu padre
Sí, ahora sabes ya que la riqueza es causa de lucha, estrés, desamor y traición de valores. Pero continúas.
Leí una vez en un blog el siguiente cuento:
Un rico empresario estadounidense fue a pasar sus vacaciones a una tranquila laguna en México, donde se encontraba plácidamente pescando un hombre con sus hijos alegremente jugando alrededor y su esposa preparando la comida. Parecían muy felices, pero también parecían bastante pobres.
El norteamericano, dándose cuenta de la pobreza de aquel hombre se le acercó y le dijo:
-¿No te gustaría ganar más dinero, ser rico?.- el hombre se lo quedó mirando desconcertado y respondió tranquilamente.
-Bueno, ¿de que me serviría ser rico?
-Podrás comprar una hermosa casa, comprarte un buen coche, y viajar a donde quisieras. Y disfrutar de tus hijos y tu esposa en lugares maravillosos.
-¿Pues no es eso lo que estoy haciendo ahora?.- respondió el pescador.
Este es el sentido de la vida. Y tal vez nos valdría más emplear cada instante de este viaje en disfrutar al máximo cada momento y no dejarlo para después
Vivir lo que deseas es obedecer a los impulsos del corazón, porque, ¿y si toda nuestra vida ha sido una equivocación?
Igual lo más sensato sería hacerlo al revés, es decir, trabajar para vivir, y no vivir para trabajar y amasar dinero. ¿Por qué no probarlo?