Me bajo del bus que me ha llevado en línea recta por delante de muchos portales. Espero a que se ponga verde para dar el paso por las manchas blancas en el calzado, y no dudo en pararme en ese lugar donde venden prensa. Hace mucho que no llevo conmigo una revista. Demasiado. Doy el dinero al señor y giro un poco la cara, ya veo en los balcones una tipografía conocida. Es la de Dior Homme.
Entro por el mismo portal de siempre. Saludo al portero – Buenos días – y comienzo a subir las escaleras que me llevaran al timbre de destino. La puerta blanca se abre y muy amables me invitan a entrar. Una chico vestido en un traje negro, me invita a un zumo de melón que aprecio notablemente. Me adelanto por elshowroom, echando un vistazo de los que allí se encuentran, hasta que llego a una cara conocida, Audrey.
Comienza la visita guiada por la colección Verano 2015. Dior Homme siempre es exquisito, luce con colorido y aprovecha la sobriedad de la elegancia. La historia tiene una parte importante en la colección. Kris Van Assche encontró una carta de Christian Dior en la que decía:
“Las tradiciones deben ser mantenidas para ser transmitidas a las generaciones futuras”
Esto se repite en forma de estampado en muchos diseños de bolsos, camisas… Pero no es el único estampado de la colección. Los dibujos coloridos también los vemos estampados y bordados en la propuesta. Los colores no se olvidan en la parte inspirada en el mar. Horizontalidad con amarillo y rojo como colores protagonistas mezclados con el azul como base. Trajes de raya diplomáticapero en horizontal con detalles como un tres piezas con camiseta sin mangas con el rojo como color en detalle.
Nacho A.