Una cosa es pelear solo, otra es hacerlo de la mano de Dios, pero otra es cuando Dios pelea por nosotros; es alli cuando logramos entender que tenemos un Dios protector que nos cuida y batalla por nosotros de modo que nos da la Victoria.
Lo mas difícil es cuando nosotros sabemos que Dios pelea por nosotros, pero nosotros queremos tomar las riendas de la situacion que podamos estar viviendo; muchas personas se ponen en el frente de batalla y son heridos , lastimados y hasta dejados en seria condicion a causa de que enfrentaron al enemigo con sus propias fuerzas y no dejaron que Dios peleara por ellos.
Si hasta este momento has peleado con tus fuerzas y peor aun has querido ayudarle a Dios; es tiempo de que lo dejes solo haciendo lo que debe hacer; si asi tu eliges dejar toda clase de batalla en sus manos para que sea el librandolo, que tal si repites esta oraciòn con nosotros: