Yo lo tengo claro hace mucho tiempo. Muchos dirán que no tengo ni idea, otros pensarán algo parecido a lo que yo pienso (otra cosa es que lo digan), como ocurre con cualquier otro tema polémico. Lo bien cierto es que tengo el convencimiento de que la Dirección General de Tráfico no sirve absolutamente para nada (multas aparte). Nos persiguen como delincuentes, se hacen pasar por nuestros queridos padres, dicen que todo lo hacen por nuestra seguridad cuando está claro que el afán recaudatorio no es anecdótico sino bien cierto, y luego, cuando los muertos en carretera descienden, no dudan en hacer grandes apariciones en prensa y ponerse medallas. No necesitan a nadie que se las ponga; les basta y les sobra con ponérselas ellos mismos sacando pecho.
Quieren reconvertir la Dirección General de Tráfico en una ONG
Nuestras carreteras, faltas de mantenimiento, están al nivel de hace más de veinte años y, a pesar de ello, se empeñan en multarnos si vamos por la izquierda evitando los baches del carril derecho ocasionados por los millones de camiones pesados que pasan por ellos, y todo ello a pesar de que no molestemos a nadie… mucho síndrome del carril izquierdo en una campaña llena de bazofia, pero lo bien cierto es que el síndrome lo tienen ellos, y tienen más de uno, el síndrome del carril izquierdo, el síndrome de lo hacemos por tu seguridad, el síndrome de pon de tu parte… (me pregunto a qué parte se refieren, aunque en vista de lo que hacen, empiezo a tener clara qué parte es esa que quieren que pongamos)
Ha quedado bien claro que si los muertos en carretera han descendido durante años es porque simple y llanamente ha habido menos desplazamientos, y los ha habido menos por la crisis, por las mejoras estructurales de los viajes en tren, por las compañías aéreas de bajo coste, etc. MENOS DESPLAZAMIENTOS = MENOS ACCIDENTES = MENOS MUERTOS.
El año pasado después de Pascua salieron los de la Dirección General de Tráfico de nuevo a hacerse la foto diciendo lo buenos que eran y cómo nos habían salvado la vida con sus puñeteras campañas, unas veces harto sangrientas y otras harto ñoñas o pseudocómicas, pero nunca, nunca, efectivas. Este año han intentado pasar desapercibidos y lo poco que han dicho es que ha habido más desplazamientos de los previstos… o sea que, cuando hay más desplazamientos, la culpa es de los desplazamientos, pero cuando hay menos desplazamientos, todo el mérito es de ellos (y la culpa nuestra)… Con estos de la Dirección General de Tráfico da la sensación de que nos quieren asustar con sus campañas de control simplemente para que baje el número de desplazamientos, porque es el único factor que realmente acaba afectando a los resultados finales.
Más radares, más helicópteros y más represión no es la manera de luchar contra la siniestralidad. Para que haya menos accidentes es necesario invertir más en carreteras (no en helicópteros cazaincautos) y más en renovar el parque automovilístico, y quizás promocionando más los trenes y los aviones… pero en cualquier caso, hemos de asumir y tener muy claro que mientras haya desplazamientos habrá accidentes, eso de objetivo cero que se ha estado escuchando últimamente es utópico, salvo que partamos también de cero desplazamientos.
En 1896 ya ocurrió un accidente mortal de automoción, y fue en Irlanda, donde falleció con cuarenta y dos años de edad una eminente científica. El coche funcionaba a vapor. Antes de eso, cuando no había coches, no había accidentes de tráfico, salvo que consideremos como tales los de los carruajes o los de los caballos…
La última propuesta de la Dirección General de Tráfico es hacerse pasar por una ONG.
¿Con qué fin? Imagino que para tener una imagen todavía más protectora y poder decirnos que todo lo hacen por nuestro bien. Bueno, por eso y por los 6,3 millones de euros al año que se embolsarían por dotación presupuestaria como una ONG VIAL.
Yo propondría que ese dinero se lo gastaran pintando carreteras, o mejorando el asfalto o la iluminación de algunos puntos y que se dejen de tanto radar y de tanto echarnos la culpa a los conductores.
Ramón Cerdá
Dirección General de Tráfico, ¿reconvertida en ONG? was last modified: abril 23rd, 2014 by Ramón Cerdá