La última tendencia en el mundo empresarial se basa en incrementar la productividad logrando la felicidad de los empleados y cuidando de que haya un ambiente laboral satisfactorio. El emblema es el nuevo cargo bajo el título de “Director de la Felicidad”. Si hasta ahora se contaba más con recursos que con personas en las organizaciones, algo puede estar cambiando cuando se empiezan a crear roles entorno a la felicidad de los empleados, subrayándose la necesidad del bienestar de los mismos para lograr mayor productividad en las empresas.
Según señala el diario El Confidencial, la empresa Open English ha incorporado a su plantilla un Director de la Felicidad. Cuando una empresa da un paso así, es porque la cultura de esa empresa apuesta decididamente por las personas que la integram, ya no viéndolas como un recurso más, ya sea financiero, tecnológico, de producción, etc. Este cambio de los recursos humanos a las personas es sin duda lo que más necesitan las empresas para reinventarse hacia modelos más humanos, que reconozcan que en realidad el recurso más importante del que disponen son las personas, y que bien cuidadas, son la fuente de su crecimiento y su riqueza, ya no únicamente a corto y medio plazo, sino también a largo plazo. Está comprobado que la alta rotación en las empresas acostumbra a ser debida mayormente a un ambiente laboral tóxico, demasiado competitivo a costa de la colaboración entre los miembros del equipo.
Cuidar a las personas siempre ha sido importante pero no siempre se le ha dado importancia. He aquí la paradoja, reconocer que la gente es importante, pero estar realmente por otras cosas. Es esto lo que han estado haciendo muchas empresas, que se han enfocado en sus productos, clientes, maximización de sus resultados financieros, etc., y por el camino han abandonado el bienestar y desarrollo personal de sus trabajadores. Las consecuencias son nefastas porque el desempeño de los trabajadores desmotivados baja enormemente, y coarta la posibilidad de innovación e iniciativa.
El CEO de Open English, Andrés Moreno, señala cuáles son las funciones de un director de la felicidad:
- Crear iniciativas de motivación
- Facilitar dinámicas de fortalecimiento de equipos
- Fomentar actividades que subrayan y promueven los valores esenciales de la empresa
La clave está en promover el optimismo y que los trabajadores vayan a la empresa automotivados, en lugar de amargados, molestos, estresados, angustiados, deprimidos, etc. No sólo se consigue la motivación de los empleados, sino que se evitan bajas por enfermedad que tan negativamente afectan a la productividad y a los resultados empresariales.
¿Qué podría hacer un Director de la Felicidad por tu empresa?
Vía|ElCondidencial.com, MBA América Economía
Más información|Ayuda-T Pymes, Felizentutrabajo.com
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