Aprovechando que hoy es un domingo de esos con algo de resaca y que no apetece moverse de casa, una de las opciones mejores para olvidar que te duele el jeto es ponerte este We Once Wished con los auriculares y a mitad de volumen, con el partido del Arsenal-Birmingham de fondo en la tv. ¡Que estampa!.
El disco es absolutamente desgarrador y sentido,y podríamos tirar de comparaciones y decir que suena a esa PJ Harvey que enamoró a John Peel, o quizás a una versión femenina del Nick Cave más moderado, incluso en algunos puntos a esos genios que fueron los Fang.
Cada canción tiene vida propia, te atrapa, te lleva a su terreno y te va hechizando con solos, ritmos entrecortados, baterías poderosas, parones, silencios y susurros. Quizá el mejor ejemplo de lo que estoy diciendo es la titular del disco.
Pero esos detalles también se esconden en temones como Before waking up, una especie de exorcismo musical, absorbente de principio a fin de la canción, y entre otras cosas, mi favorita del disco; o la más agresiva en cuanto a actitud Hughs that wont last. Eso si, si hay una canción bonita entre todas las del disco, esa es Reason, material sensible para corazones tristes.
Buen gusto ya desde la portada. Y es que no todo lo bueno tiene que venir de fuera...