Hace ya años que dejé de "pedir perdón" porque me gusten las canciones de OBK. Hubo un tiempo en que se cuestionaba incluso tu opción sexual sólo por seguir atento su discografía, y como a servidor es algo que eso le importa unos cojones, pues...
A título personal, tengo los dos primeros vinilos del grupo, y algo rayados de tanto que los escuché en su momento y el cassette de Trilogía, que aunque tenía una portada para denunciarles, contenía mi preferida del grupo, Mi razón de ser, aquí demasiado maqueada para mi gusto.
Dice el tango que 20 años no es nada, y para Jordi y Miguel parece que estas dos décadas les han sentado como agua de mayo, ya que aparte de regrabar sus éxitos de siempre adaptándolos a los tiempos (aunque nunca han dejado de sonar actuales nunca), e incluso se permiten colaboraciones como Moenia (que no sé quién narices son, habrá que investigar) en Yo no me escondo o el gran Umberto Tozzi en la revisión de Falsa Moral, además que también hay cabida para remixes o versiones en inglés o italiano de alguno de sus hits.
Dentro de este 20BK está todo lo que tiene que estar, desde los grandes éxitos que nos trasportan a muchos a nuestra edad del pavo como De que me sirve llorar, Historias de amor, la más sugar La princesa de mis sueños (con la que muchos hemos soltado alguna lagrimilla); o los más recientes Lucifer o Tu sigue así , de la época Carlos Jean del grupo y su primer punto de reconversión.
En estos tiempos en que ir de abierto y de guay en el moderneo, no estaría de más que mucha gente se desprejuiciara un poco y apostará por estos valientes catalanes, aunque sólo fuera por recorrido y por solvencia, al menos así de entrada, que es muy fácil ser abierto a base de webs tendencieras en la que hay más morralla que talento.
Siempre con Depeche Mode en el horizonte (jamás han dejado de reconocerlo), y guardando las distancias, escuchando todo lo andado hasta la fecha con sus ingredientes a base de oscuridad, dobles lecturas y estribillos redondos y contundentes, OBK deberían ser un referente en su estilo en este país que no sabe de cultura, sinó de cantantes de karaoke y flamenquillos de medio pelo ( o pelo de cenicero, o sea que ni medio), o incluso considerarlos unos clásicos generacionales, que se lo tiene merecido.
Su EP, Pride 2011, para el Día del Orgullo Gay ha entrado directo al número 4 de Itunes. (Notícia de última hora).
"yo no me escondo, ¿por qué lo haces tú?..."