Ya sólo por el título del disco merecería tener un reconocimiento público a gran escala, en el cúal ya nos demuestra sencillez, modestía (a veces sana) y un sentido del humor a prueba de bombas.
En esta recopilación nos regala tres temas inéditos; Paris, Tokyo, New York, donde nos hace viajar no solo físicamente sino sensorial y espacialmente, virtud esta última de una de las señas de identidad de algunas de sus canciones, Adicción, rescatada de las sesiones de 2 y las nadadoras, con un marcado y suave ritmo funky y la versión maquetera de Amor de estómago, más desnuda que la que conocíamos y que fué grabada en 2003.
Mención especial a la ya catalogada como mi canción del verano, la reinterpretación del temazo que es Me quemas bastante, junto a Bimba Bosé, la cúal nunca ha sido santo de mi devoción y que aquí simplemente me atrapa, así que tal vez debería dejarse producir por el bueno de Raúl, que con su apellido quizás llegaría mucho más allá. Recupera las colaboraciones con Ivan Ferreiro en Astronauta 7 y con Miqui Puig en Encantadora Lunática, la cúal también está en un remix de Cienperros (pseudónimo del mismo Pecker).
Más remixes a cargo de Dj Niño en Me quemas bastante, la versión habitual en sus directos, de Carlos Sainz en La noche no es para dormir o la Dirty Remix de Souvenir.
No por eso se olvida de sus éxitos, aun que sean pequeñitos para muchos(y gigantes para otros), y disfrutamos de Treinta y cinco, Sentirse bien, Tu boca es espiral, Surfeando magnolias, Las cinco, etc...,siempre oyendo las peticiones de sus seguidores, los cuales le enviaron sus preferencias por algunas de las redes sociales que no voy a nombrar para no hacer publi. La mía no distaba tanto de lo que hay aquí, jejejeje.
Poquito a poquito, ese hombre invisible del título, va creciendo en presencía pública en los medios, cosa lógica y necesaria por otra parte y ataca de frente con talento a esos que dicen que no es lo suficientemente indie, cuando les daría a muchos flequilleros una lección de cultura musical casi sin levantar un dedo.
Pecker, nosotros te vemos (al menos lo digo a título personal) y esperemos que eso lo podamos decir muchos años y que llegues simplemente dónde te mereces, que seguro que es muy arriba. Y la portada, espectacular, simplemente.
Me enciendes, me quemas, pero luego te vas...