Poco tiempo antes de morir, a comienzos de los 90, Miles Davis estaba detrás de un nuevo cambio. El tipo que había torcido la historia del jazz al menos tres veces seguía inquieto 35 años después de haber grabado sus primeros discos.
Según cuenta Gordon Meltzer -uno de los productores de "Doo-bop", Miles tenía un sonido en mente. Desde su departamento de Manhattan, y con las ventanas abiertas en pleno verano, quería encontrar una música que captara ese feeling urbano. La mezcla caótica del sonido de las calles, las músicas y el tráfico de la gran ciudad. Sin querer, estaba pensando en el Acid Jazz que dominaría la escena en los siguientes años.
Quería, además, que esta nueva música no se pasara exclusivamente en las radios de jazz, sino que hiciera el crossover a las de programación urbana.
Fiel a ese carácter vampírico que lo había movido a lo largo de toda su carrera, a comienzos de 1991 Davis buscó rodearse de productores jóvenes que lo ayudaran con la idea. Ahí apareció en escena Easy Mo Bee, un músico y productor de Hip Hop con el que Miles tuvo una química instantáne. La cosa funcionaba así: Easy Mo le mostraba varias bases, y cuando a Miles le gustaban, iba al mic para grabar sus líneas de trompeta. Así de fácil completaron seis tracks que fueron a parar a "Doo- bop".
Yendo al disco, acá hay música voladora. Impronta de jazz, con una vibra muy suelta. Y un feeling, desde ya, 100% urbano. ¿Se cumplió lo que imaginaba Davis? En muchos puntos, sí. De hecho, entre los surcos de "Doo-bop" respira la ciudad. Un gran disco para escuchar en movimiento: en el auto, o con auriculares, andando en bici, moviéndonos por ahí. Un disco para darle "repeat" varias veces. No pesa. Pasa como el aire entre los edificios y los autos y la gente.
En septiembre de 1992 Miles fue al hospital para una visita de rutina. Supendió el trabajo y le dijo a todos "voy a estar de vuelta". Falleció el 28 de ese mes. "Doo-bop" se completó con algunos tracks de trompeta que había dejados grabados para otros proyectos (sigue siendo mítico el disco en conjunto con Prince) sobre los que Easy Mo Bee agregó bases y otros sonidos (los temas que fueron completados después de la muerte de Miles fueron "High speed chase" y "Fantasy"). El disco se editó póstumamente, en junio de 1992.
Estas noches de primavera en Buenos Aires dan para abrir las ventanas y dejar sonar "Doo-bop".
El último Miles
Tutu (1986) Music from Siesta (soundtrack, 1987) Amandla (1989) Aura (1989) Dingo (soundtrack, 1991) Doo-bop (1992).
Chequear también: * Brooklyn Funk Essentials, Cool & steady & easy (1994)
* US3, Broadway & 52nd (1997)
* St. Germain, Boulevard (1995)