El sexto disco de Roxy.
Para Roxy Music el despegue del barroqusimo y las formas más Arty de sus primeros años ya había comenzado a insinuarse en "Siren", su disco de 1975.
Tras un parate cubierto por la edición del lp en directo "Viva!" y su primer "Greatest hits", en 1978 el grupo volvió a los estudios para grabar su sexto álbum de estudio. Claramente un disco de transición, "Manifesto" siguió de cerca la transformación del monstruo demencial de los cuatro primeros opus a un producto de FM para amantes sofisticados. Pero todavía faltaba para los sonidos lustrosos de "Avalon".
En algún punto, es cierto, "Manifesto" es una de las entregas más flojas de Ferry y compañía. Un poco por la flaqueza de algunas composiciones (como curiosidad, la edición original dividía los lados en un "East side" y "West side" respectivamente).
El disco tarda en entregar material con sustancia: "Manifesto" (el tema) y "Thrash" (con especial lucimiento de ese gran guitarrista subestimado que fue Phil Manzanera) demoran el trámite y recién con "Angel eyes" el grupo logra un momento inolvidable. Tal vez la primera de sus gemas pop de alto alcance (aunque no habría que olvidar el "Love is the drug" de "Siren").
"Ain´t that so" parece anticipar el sonido venidero -ya con un pie en el chill out de las boites de los 70´s- mientras que "My little girl" y "Stronger through the years" no aportan demasiado a las alturas habituales a las que venía volando Roxy. En esos surcos el grupo suena fláccido, sin convicciones.
"Dance away"- otro futuro clásico- levanta la puntería a pura magia. Como en todos los casos de grandes bandas de rock (de las grandes en serio) cualquier mortal daría la vida por 3 minutos, 45 segundos de esa música superior a casi todo. Romanticismo, altura, elegancia. "I close my eyes and dance till dawn" canta un Ferry cada vez más cómodo en su papel de crooner para modelos de alta costura. "Still falls the rain" extiende el momento de gracia con una de esas piezas sentimentales y europeístas que siempre fueron el fuerte de Brian. Está bien: hay un arrastre de los discos anteriores, pero el tema funciona.
"Spin me round" cierra el set con una nota melancólica y hermosa.
Bonus
Como regalo, los dejo con esta versión de "Dance away" en vivo nada menos que presentados por las chicas de ABBA en Suiza. Pertenece al recomendable dvd doble "The thrill of it all- A visual history 1972-1982".
Roxy Music 1979Phil Manzanera, Brian Ferry, Paul Thompson, Andy Mackay, Gary Tibbs, Alan Spenner, Paul Carrack.
Discografía cercanaViva! (1976)- Manifesto (1979)- Flesh + blood (1980).