Discurso de investidura de Ganemos Palencia 2015

Si analizando la crisis se llega a la conclusión de que el sistema es malo y hay que cambiarlo, no se ve el motivo por el cual ser antisistema tenga que ser malo. El primer principio de la lógica elemental dice que ahí hay una incoherencia, una contradicción. Si el sistema es malo, y hasta rematadamente malo, lo lógico sería concluir que hay que ser antisistema o estar contra el sistema.
¿Es tan malo ser antisistema?
Paco Fernández Buey y Jordi Mir

Empezamos con una cita de Paco Fernández Buey, el gran pensador palentino catalán, al que nuestro grupo cita en esta jornada de investidura.
Quisiéramos citar desde Ganemos Palencia a todos los trabajadores y trabajadoras de nuestra ciudad que se encuentran en circunstancias difíciles, con Expedientes de Regulación de Empleo, contratos precarios, personas despedidas, desempleadas, trabajadoras de Los telares, de La fábrica de Armas, de itevelesa, de ediciones Simancas, de Carrefour, de Seda, … También una mención a los pequeños y pequeñas comerciantes de Palencia que ven como su sueño de mantener un establecimiento en el barrio se complica cada vez más en una competitividad imposible contra modelos de negocio que crean menos empleo y que generan riqueza fuera de nuestra ciudad.
Trabajaremos arduamente para transformar esta realidad de despoblación, emigración, desempleo y precariedad que impide a las personas realizarse y poder vivir dignamente en Palencia.
Las elecciones del pasado 24 de mayo marcan el camino por el que va a discurrir la política en nuestra ciudad los próximos años. No va a haber posibilidad de imponer decisiones por parte de ningún grupo político que no tenga capacidad de negociar con al menos otro grupo, lo cual será novedad en este pleno tan acostumbrado a las mayorías absolutas. Este aspecto relevante es el que cita Jorge Riechmann parafraseando a Oscar Wilde: “La democracia cuesta demasiadas tardes libres”. Dando a entender que para conseguir una verdadera democracia no vale con votar cada cuatro años y luego olvidarse, hay que participar y construir Palencia durante todos los días. La diferencia entre quienes defienden una democracia representativa y quienes defendemos una democracia participativa es evidente. Más democracia es participar activamente en la construcción política de nuestra ciudad, no sólo quienes somos elegidos cargos electos, sino todo el mundo. El anhelo de una democracia real es cada vez más intenso entre la ciudadanía. Por eso vamos a proponer la remodelación del Reglamento de Participación ciudadana para conseguir una ciudad autogobernada por sus ciudadanos y ciudadanas en cuestiones tan relevantes como el Parque Ribera Sur, el paso a nivel de los tres Pasos y la ubicación del Archivo de la policía nacional en un sitio distinto a la Antigua Cárcel.
Solo este aspecto hará que los grupos políticos tengamos más presente el diálogo, ya que va a tener que haberlo para que se tomen decisiones relevantes en nuestra ciudad. Quien no tenga esta capacidad, esencial para la democracia, tendrá que desarrollarla o dar un paso atrás y dejar que otras personas puedan poner los intereses de Palencia por encima de los del partido.
Samuel Beckett escribía hace unos años: “Da igual. Prueba otra vez. Fracasa otra vez. Fracasa mejor.” Esa es la dinámica en la que nos hemos enfrascado y complejamente podremos abandonarla, aunque nuestro fracaso pueda mejorar la construcción del proyecto que tengamos para Palencia y haya que intentarlo de nuevo.
Investiguemos en nuestro fracaso la política del buen vivir que se está realizando en diversas partes del mundo para organizar una nueva ciudad, una ciudad en transición hacia un nuevo modelo vivible y sustentable, donde la juventud pueda elegir Palencia para llevar su proyecto de vida, con un proyecto de empleo garantizado que permita tener un trabajo digno y dignamente remunerado a todas las personas. “Me he dedicado a hablar de lo imposible, porque de lo posible se sabe demasiado”. Dice Silvio Rodríguez en una canción, ¡hagámoslo!
Vivimos tiempos convulsos donde los poderes económicos han decidido ir contra los derechos y las conquistas sociales de la mayoría de la población. Pero también donde la sociedad civil y los movimientos sociales nos hemos organizado para proteger una sociedad del bienestar posible y deseable para quienes vivimos en ella. Buscamos una “revolución democrática” que permita que haya un nuevo sistema económico donde la persona pase a ser el eje vertebral sobre el que se planifique la Economía, sin esclavitudes, ni dependencias, defendiendo al ser humano independientemente de su procedencia o nacionalidad. Defender el Mercado en Palencia implica no defender nuestra ciudad porque no es una ciudad interesante para el Mercado, nosotras y nosotros somos partidarios de defender a las personas por encima de los intereses del Mercado.
Queremos una ciudad como espacio de relaciones, con actividades y funciones muy diversas(vitales, culturales, económicas y políticas) que pueden reforzar o debilitar la cohesión social y la calidad democrática. Para nosotras y nosotros, el municipalismo es el proyecto político fundamental para mejorar la vida de la gente y sin mayorías absolutas democráticamente perjudiciales.
Cuatro años después hay que volver a hablar del 15M en este pleno, en la importancia de lo que pasó en las plazas como un espacio de confluencia de gente diversa pero con anhelos cercanos. Entonces se abrió un nuevo periodo de movilización que ha cuajado en diversas plataformas, como Ganemos Palencia, que se va a constituir en grupo municipal, donde hay personas que nunca se habían planteado la opción electoral, que estábamos haciendo política en el ámbito de la educación, de la vivienda, del ecologismo, de la cultura, de la profundización democrática. Reivindicamos otra forma de hacer política con voluntad y capacidad de influir en las decisiones que se tomen desde nuestra concepción del mundo. Una política que descansa en la horizontalidad de las “viejas Asambleas”, la movilización social y la construcción de un contrapoder buscando la coherencia entre nuestras ideas y nuestras acciones. Desde ahí es desde donde vamos a aportar, impregnando la Institución de nuestras formas políticas y participativas.

Quisiéramos exponer tres reflexiones para finalizar la exposición:

1. Consideramos necesaria la desmercantilización de los servicios públicos que presta el Ayuntamiento, mediante la remunicipalización de servicios esenciales para la ciudadanía y la sustitución de consumos privados e individuales por consumos públicos y colaborativos.
2. La segunda respecto a la necesidad repensar una Palencia para el futuro, una ciudad con reducciones importantes de emisiones de CO2, con infraestructuras adecuadas a nuestras necesidades, con la adaptación del Plan General de Ordenación Urbana a la realidad social, una ciudad donde se potencia la banca ética, el trueque. los grupos de consumo de productos ecológicos, una ciudad en transición hacia otro modelo posible y sustentable, con energía renovable y alternativa en instalaciones fotovoltáicas y térmicas bien integradas en los edificios
3. La tercera respecto a los puntos que considerábamos había que poner encima de la mesa en este proceso de investidura, aquello que preocupa a la ciudadanía palentina y está recogido en nuestro programa electoral. Y en alguno de cuyos puntos estaremos de acuerdo todos y otros habrá que intentar por parte de nuestro grupo sacarlos adelante porque el programa electoral ha sido el compromiso con la ciudadanía: Plan de emergencia de empleo garantizado, Fondo para pobreza energética para garantizar los servicios básicos, medidas contra la infraalimentación, medidas para garantizar un techo a toda persona, comisión de transparencia, criterios públicos y consensuados para las contrataciones, auditoría ciudadana de las cuentas municipales y cesión de los recursos materiales e inmobiliarios el Ayuntamiento a las Asociaciones que lo soliciten.

Y una última frase de Jordi Mir, discípulo y amigo de Paco Fernández Buey, a propósito de la ética y su relación con la política:

“No dejar de pensar que cada decisión, cada análisis, cada propuesta, cada argumento, cada pregunta, cada respuesta tiene la capacidad de construir democracia y también de debilitarla. “