A vosotros me dirijo.
Vosotros que cuando os preguntan: ¿a quién va dirigida vuestra colección? Siempre respondéis, "a una mujer urbana y segura de sí misma". Pobres mujeres rurales e inseguras, ¿es que ellas no tienen derecho a vestir bien y sentirse guapas? Cómo sois. Claro que, en realidad, a la pregunta: ¿a quién va dirigida vuestra colección?, la respuesta sincera sería: a mujeres asquerosamente ricas y asquerosamente delgadas. Pero eso no queda bien decirlo en público.
Sé que no es fácil diseñar tanta colección y más con la competencia atroz de las firmas low cost que, no sólo te copian sin piedad...:
...es que además, mientras tú haces todo en talleres artesanalmente, ellos lo hacen usando mano de obra infantil de países del tercer mundo. Es que así no vale. Anda que no me iba yo a hinchar a escribir capítulos si contara con un montón de manitas a razón de un euro la hora tecleando por mí. Sería la Corín Tellado de los guiones.
Pero, diseñadores del mundo, no os compliquéis la vida volviendo al estilo bohemio de los 70, al grunge de los 90, al estrambótico de los 80... ¡volved pero más atrás aún! Reivindiquemos el pasado. Túnicas griegas para el verano y vestidos de musa del Renacimiento para el invierno. Y para ellos, el romanticismo inglés:
Sí, vale, a Michael Fassbender cualquier cosita le queda bien.
Más sobre este fascinante tema aquí, en mi nueva colaboración para Glup Glup. Como siempre, comentad donde más rabia os dé. Aquí o allí.
Y decidme, ¿por qué los diseñadores se niegan a hacer ropa para las mujeres rurales y tímidas?, ¿no creéis que iríamos más regias, con mucha más actitud al trabajo si en vez de con vaqueros fuéramos con gorguera, mangas acuchilladas y chapines?