En este post les vamos a exponer las averías mas frecuentes en los cuadros de instrumentos de los Seat Ibiza III.
Estas averías se produce en los modelos comprendidos entre el año 2002 y 2008, en los tableros fabricados por VDO y Magneti Marelli.
Los síntomas que presentan son:
· El vehículo no arranca y da fallos de inmovilizador bloqueado.
· No funciona el zumbador. No da señal acústica de luces encendidas, intermitentes, averías...
· Display pixelado o borroso.
· Defecto en el funcionamiento de los indicadores de velocidad, r.p.m., temperatura y nivel de combustible. · Defecto en la activación de los distintos testigos.
· No presenta códigos de averías Los códigos de avería más comunes son:
Alguna de las referencias afectadas son:
Con los
· 6L0920801
· 6L0920802
· 6L0920803
· 6L0920820
· 6L0920823
Para verificar que la avería resida en el cuadro de instrumentos y así descartar posibles problemas en la instalación del vehículo o en algún sensor, se pueden efectuar varias comprobaciones.
esquemas eléctricos del vehículo y algún aparato de medida (multímetro, osciloscopio, máquina de diagnosis...), se pueden efectuar verificaciones como pueden ser: comprobación de alimentaciones, masas, señales (r.p.m, de aforador, sensor de temperatura....) e incluso entrar con una máquina de diagnosis al apartado de instrumentación y efectuar un test de actuadores del cuadro de instrumentos.
La mayoría de las averías en los relojes o indicadores, son causadas por un funcionamiento defectuoso de los motores paso a paso que hacen girar las agujas. Éstos se rompen y dejan de funcionar o tienen un funcionamiento defectuoso, van a trompicones.
En referencia al fallo de displays o pantallas, cada vez más habitual en los tableros modernos, requiere, en la mayoría de los casos, de la sustitución del display viejo por uno de nuevo.
Próximamente se realizará un post hablando de esta avería y algún consejo básico para prevenirla. En el caso que, tras la comprobación efectuada, se descarte problemas en la instalación del vehículo, se puede proceder a sustituir el cuadro afectado por uno de nuevo, teniendo presente que éste debe ser codificado, o enviar el cuadro a un centro especializado para la comprobación y reparación del mismo.