Son muchas las ocasiones en que nos encontramos dividiendo los espacios con muebles, desniveles, y hasta con biombos propios de los 80, pero hoy en día, época de moda de los espacios Open Concept, no solo podemos ni queremos dividir el espacio sin elementos, si no, que ha ser posible, sea de esos en los que no estorben, sean estéticos y no corten o empequeñezcan el espacio.
¿Pero y como hacemos esto?
Pregunta difícil, solución… dividir visualmente. Y para ello, el mas claro ejemplo, lo traigo al blog, con una vivienda que a parte de convertirse en una delicia de inspiración para los atrevidos en las mezclas, posee ese punto familiar que le da el aire vivido y muy natural.
“Dividir el espacio puede servir para cambiar materiales, destacar elementos o sencillamente cortar visualmente con la imagen pulcra de un espacio.”
Y es que esta casa, emplea esa técnica de dividir haciendo cambios de color, añadiendo elementos decorativos o incluso un cambio de materiales, en el espacio que se interpone entre el salón y la cocina.
Un lugar de tendencia con materiales de inspiración vintage, pero la actualidad del estilo nórdico con piezas industriales.
Una casa, que tengo en la recamara y que inspira para algunos de los proyectos que están por arrancar, o de los que ya rebullen en mi cabeza.
Y a vosotros ¿que os parece?