Dentro de la dieta vegetariana existen diferentes prácticas y tendencias. Algunas de ellas también engloban una filosofía de vida con una ética particular.
A continuación se detallan las más populares.
Veganismo
Se ingieren exclusivamente alimentos de origen vegetal
No se especifica en qué época se deben comer ni de qué manera
Es también una filosofía que excluye cualquier forma de explotación hacia el reino animal.
Vegetalismo
Sólo permite alimentos de origen vegetal y excluye las legumbres
Considera los productos lácteos y huevos más perniciosos que las carnes
Preconiza un orden a la hora de comer cada tipo de alimento, con una forma de preparación y cocción determinadas.
Crudivorismo
Incluye solamente los alimentos que puedan consumirse crudos
Los zumos de frutas no están permitidos pues se vuelven incompletos al separarlos
Incluye normas en cuanto a la distribución de las comidas y sus incompatibilidades
Higienismo
Trata sobre la incompatibilidad de ciertos alimentos, sobre el correcto orden de ingerirlos y cómo hacerlo.
Considera que el origen de las enfermedades, y por tanto su curación, está relacionado con la alimentación.
Considera que la dieta ideal es la frugívora o crudívora con exclusión de todo alimento de origen animal.
Naturismo
Se permiten consumos moderados de carne si no puede prescindirse de la misma.
Al contrario que el higienismo promueve las mezclas de categorías de alimentos
Recomienda la abstención de todo alimento muy concentrado como legumbres y frutas ácidas.
Macrobiótica
Escuela japonesa que se basa en una clasificación de los alimentos y nutrientes en dos categorías: yin y yang.
Clasifica diez niveles de alimentación siendo vegetariana en los niveles más altos
En sus niveles inferiores supone una mejora en la alimentación en comparación con la dieta occidental, pero en los niveles superiores ha trascendido cierta polémica en cuanto a su peligrosidad para la salud.