Documentando la vida

¿Qué hacemos cuándo estamos en paro? Millones de españoles hemos decidido hacer lo único que podíamos: volver a estudiar. Ahora, en mi vuelta al mundo escolar, disfruto de coger apuntes, de llegar puntual a clase, de preguntar y preguntar a los profesores, lo que no hacía hace 10 años atrás por vergüenza.

En el último módulo de Documentales que hemos visto, he descubierto dos en concreto que me han impactado. El primero, “Enjoy porverty” (disfruta de la pobreza) El autor, el documentalista holandés Renzo Martens enseña a los congoleños, en uno de los capítulos, a sacarle partido a la pobreza. ¿Si los europeos lo hacemos, por qué ellos que son los protagonistas de su miseria no pueden? Martens vende su alma al diablo, y muestra a los africanos cómo hacer dinero con la muerte, la malnutrición, el dolor y el sufrimiento. La película es taaaaaan polémica que no se encuentra ni en youtube, ni en vimeo, y ha sido vetada en muchos festivales. Les enlazo el tráiler, que no les da mucha idea, pero les aseguro que es una de las cintas más fuertes y peor digeribles que he visto en mucho tiempo. Te das cuenta de la mierda en la que vivimos. Y peor. De la que formamos parte. Si la pueden conseguir, se la recomiendo.

Pero no les quiero dejar con ese mal sabor de boca. También descubrí esta otra joyita, que parece que salió en varios Telediarios nacionales. No tiene un gran guión, ni una gran producción detrás. Pero tiene un mensaje importante: no sólo que los críos deben crecer en la tolerancia y el respeto en todos los ámbitos de su vida, en la que entra el deporte, si no que los padres deben inculcarles esos valores a sus hijos, y no ir a sus partidos como si fueran hooligans ingleses dispuestos a partirle la cara a un crío de 6 años por un fuera de juego.

Y ahora, en voz baja les confieso, que después de una pechada de documentales y cortos “alternativos” o “minoritarios” absolutamente maravillosos, me estoy pegando Star Wars en Blu-Ray. Durante toda la semana he llamado a mi perro R2D2, y ni me he inmutado. Él tampoco.

Gozando la vida.