Dolor de estómago en niños

Cuando los niños se quejan de tener dolor de estómago la primera reacción de los padres es la preocupación. Hay quienes frente al menor indicio de enfermedad terminan suponiendo lo peor (afecciones graves que necesitan de una operación, como apendicitis). Para estar preparado en caso de que los niños de la familia manifiesten un malestar como dolor de estómago es necesario conocer las posibles causas de estos dolores.

Una de las causas más frecuentes de dolor de estómago en niños pequeños es la acumulación de gases en los intestinos. Esto puede tener origen en una mala combinación de los alimentos o puede ser la consecuencia de comer demasiado rápido o masticar mal la comida que se le da. En algunos casos los gases también pueden estar ligados a emociones como el miedo y distintos tipos de situaciones estresantes.

El dolor de estómago en niños también puede ser un indicador de inadecuada actividad de la flora intestinal. El consumo de productos probióticos (como el kéfir y los alimentos fermentados) ayudan a reconstruir la flora intestinal y tienen otros beneficios añadidos que vale la pena aprovechar.

El estreñimiento es otra de las causas comunes de dolor de estómago en niños. Es bueno controlar la frecuencia con la que los niños evacúan sus intestinos (lo ideal es que no sea menos de dos veces al día). En casos de estreñimiento se aconseja incrementar el consumo de frutas y verduras crudas, y de alimentos integrales ricos en fibra (una de las alternativas más prácticas es la de incorporar cereales como la avena en el desayuno, todos los días). Solo en algunos casos, cuando el dolor de estómago esté acompañado por diarrea crónica puede ser útil consultar al pediatra en busca de consejos adicionales (pueden necesitarse algunos análisis para localizar microbios).