La artritis es una afección crónica dolorosa que lamentablemente no tiene cura y afecta a mucha gente. Hay más de 100 tipos de artritis, muchos de ellos con diferentes causas.
La artritis reumatoide, por ejemplo, es causada por el propio sistema inmune del cuerpo que ataca las articulaciones, mientras que la osteoartritis es causada por daños en las articulaciones que resulta del roce entre sí y el desgaste de las mismas con el tiempo. Esto provoca un mayor daño a la articulación que se traduce en dolor cuando se mueve la articulación, así como hinchazón e inflamación que causan más desgaste.
Por otro lado, la gota es causada por una acumulación de ácido úrico que termina cristalizándose y formando depósitos alrededor de las articulaciones que causan el dolor y rigidez.
La artritis puede ocurrir en muchos lugares, pero una de los más incómodos y desagradables es la cadera. Por desgracia, en la mayoría de los casos habrá poco que se pueda hacer para eliminar el dolor.
Sin embargo, una pauta básica es no sentarse en el mismo lugar durante largos períodos de tiempo ya que esto hará que la cadera se vuelva más rígida. Se debe tratar de mantenerse bastante activo y asegurarse que, cuando se está sentado, se cambie de posición con regularidad.
También es importante mantener los músculos alrededor de la articulación tan fuertes como sea posible ya que esto ayudará a tomar amortiguar el peso del cuerpo sobre la cadera y ayudará a que el movimiento en esa articulación sea más suave y más firme.
Uno de los mejores ejercicios a realizar cuando se tienen estos problemas es la gimnasia acuática, donde el impacto hacia las articulaciones será mucho menor.