Utilizando los colores rojo, azul, amarillo y verde una característica usual en Joan MiróJoan Miró quiso dar su toque personal, mediante una obra que destacaría por los colores primarios que solía utilizar en muchas de sus obras. La escultura fue finalizada en 1983, justamente ocho meses antes de su muerte, El mismo Miró, fue quien dirigió las obras. Dona i Ocell, está realizado con hormigón cubierto de un mosaico estilo trencadís, como los que realizaba el genio Antoni Gaudí.
No faltó la polémica por la forma de la escultura
