♥ Aunque se habla de “donación del cordón umbilical”, lo que se dona no es el cordón, sino la sangre que contienen éste y placenta. Es una sangre muy rica en células madre. Estas células tienen la capacidad de curar enfermedades de la médula ósea congénitas (de nacimiento) o adquiridas, como las leucemias agudas. Para estas enfermedades puede usarse médula ósea que algún adulto haya donado, o sangre del cordón umbilical. La donación de médula ósea es un procedimiento invasivo y doloroso, la de sangre de cordón, ni lo uno ni lo otro. Además, la compatibilidad de células que provienen del cordón umbilical es más alta que la proveniente de médula ósea. La mayor compatibilidad se encuentra en familiares directos, aunque aún así, la compatibilidad no se da en un 70% de los casos. Para ellos, se recurrirá a un banco de células madre recogidas de donaciones.
♥ Si se desea donar, hay que rellenar un cuestionario y firmar un consentimiento informado. La información que hay que aportar al cuestionario es sobre criterios de exclusión que indicarían que no se es candidato a la donación: antecedentes de VIH o hepatitis vírica, drogadicciones, promiscuidad, enfermedades, etc. Hay que informarse antes de dar a luz, puesto que no en todos los hospitales se recoge sangre de cordón para donaciones y, en los que se recoge, puede haber días de la semana en los que no se haga.
♥ La donación es confidencial (la mamá no sabrá jamás quién ha recibido esa sangre ni quien la reciba conocerá la identidad de esa madre o niño) y gratuita, nunca se recibe compensación económica por realizar una donación. ¿Y si el niño necesita el día de mañana esa sangre? la probabilidad es de 1 cada 100.000 y la recibirá si está disponible, es decir, si no la ha utilizado ya otra persona. Si no está disponible su propia sangre, se buscaría una compatible de otro donante.
♥ Cuando el bebé nace, inmediatamente se pinza y corta el cordón umbilical. Se pincha el extremo del cordón umbilical unido a la placenta (que aún estará adherida al útero) y se recoge la sangre en una bolsa de donación. También se le sacarán a la mamá 2 tubos de sangre con una analítica, para analizar que todo esté correcto y sea apta para la donación. Al bebé no se le pincha en ningún momento.
♥ Hay un bulo bastante extendido que afirma que los bancos están hasta los topes y no aceptan más muestras. No es cierto, no sólo sigue habiendo capacidad de sobra para guardar más donaciones, sino que, por muchas que haya, puede que sea justo la tuya la compatible que logre curar un linfoma a un niño.
♥ En España sólo hay 7 bancos públicos de sangre de cordón umbilical: en Barcelona, Galicia, Málaga, Madrid, Bilbao, Valencia, Tenerife. Esto no significa que en el resto de lugares no se pueda donar, la sangre se recoge y se envía hasta el banco con el que el hospital tenga convenio.
♥ Puede que se cumplan todos los criterios y se esté decidida a donar en el momento del parto, pero que, durante su transcurso, se den situaciones que impidan la donación: síntomas de infección en el recién nacido, fiebre materna durante el parto, llevar más de 24 horas con la bolsa rota, que el líquido amniótico esté teñido de meconio. Si, llegados a este punto, la donación no puede ser posible (o se hubiera decidido no hacerla por cualquier motivo), lo correcto será pinzar y cortar el cordón umbilical cuando deje de latir. Ya que esa sangre no va a poder curar ninguna enfermedad grave a otra persona, al menos que el recién nacido aproveche esas reservas extras de hierro.
♥ Puede ocurrir que, una vez recogida la sangre, la bolsa deba desecharse, puesto que hay un volumen mínimo requerido para que sea útil y, si no se alcanza, no puede realizarse la donación (ronda los 120-150ml).
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