Su carisma, su forma de expresar y vivir la vida, cómo vive el deporte y sobre todo, cómo lo vende, hace que sus casi 50.000 suscriptores en YouTube le vean como todo un ejemplo a seguir, y como una auténtica máquina.
Su último reto era una prueba de BTT por relevos en varias etapas donde tendría que recorrer una cantidad ingente e inhumana de kilómetros para llegar a Lisboa. #ALisboaORevienta era el HT de twitter que habilitó para comunicarse con sus seguidores.
Imagen obtenida de: https://www.youtube.com/channel/UCG5IfQYv9S9HIsrICDcZaZQ
Ha estado entrenando durante un par de semanas y, como de costumbre, ha estado subiendo VLogs donde nos contaba su evolución y de paso, nos promocionaba a sus preparadores físicos, fisioterapeuta, nutricionista, tienda de bicicletas, etc. Algo que me parece estupendo, especialmente en el mundo donde vivimos, donde el patrocinio deportivo es clave si quieres avanzar.
A nivel personal, admiro a Valentí como podría admirar a cualquiera que se atreva a calzarse unas zapatillas y plantarse en la calle a correr. Le admiro, como a cualquier otro que tenga la valía de salir a hacer deporte o de, simplemente, descubrir sus límites y tratar de superarlos de forma responsable y saludable.
Imagen de Google Images: http://whereisthelimit.com/
Sin embargo, su filosofía (al igual que la del club al que pertenece) no son del todo de mi agrado. Bajo el lema "where is the limit?" se practica deporte bajo referentes como Josef Ajram (genética de élite), se exprime cada pequeña gota de sudor y se busca precisamente eso, llegar al límite. Al menos, es la filosofía que aprecio en sus vídeos.*Aportación vía FB (importante a tener en cuenta): "La filosofía de where is the limit? es hacer ver a la gente que todos llevamos un finisher dentro. Que todos podemos enfrentarnos a grandes retos y superarlos. Pero siempre desde la preparación, el trabajo y la constancia. Por supuesto, para llegar a la meta deseada hay que trabajar duro".*
El lema, podría ser traducido al español como el típico "vive deprisa, muere joven y deja un bonito cadáver". Por desgracia, es lo que ha estado a punto de sucederle a este gran atleta.
En una de las etapas, sufrió un percance y se cayó a través de un gran desnivel sufriendo una contusión en la cabeza que bien podría haber acabado con su vida de no ser por el casco.
En el vídeo que os muestro a continuación, expresa cómo sucedió el accidente y la situación en la que estuvo, hasta que llegaron los servicios de emergencia.
Todo ello, lo narra emocionado pero también intentando darle un toque de positivismo y buen humor al asunto. Incluso graba el vídeo con el pijama de paciente puesto y muestra el estado en el que quedó su casco tras el trauma.
A nivel personal, valoro que hay una especie de "promoción" a realizar y mitificar este tipo de actos. Hecho en falta un poco más de realismo, de sentido común y un poco menos de sentido del humor. Está genial que queramos experimentar con nuestros límites, pero siempre de forma segura y sabiendo que hay cosas... que nos pueden hacer daño. (me quedo con el comentario vertido en FB por un lector, que se ajusta a una idiosincracia más loable).
Espero francamente que Valentí se mejore, y que pronto nos vuelva a traer vídeos tan entretenidos como los que acostumbra. Pero también espero que se relaje un poco y empiece a darse cuenta de los peligros a los que se somete, y que la vida puede ser intensa y divertida sin necesidad de cometer locuras extremas.
Ahora, como lector me gustaría conocer tu opinión. ¿Conoces los vídeos o al personaje de Valentí San Juan? ¿Cuál piensas que es su filosofía de vida? ¿Estás a favor o en contra del lema "where is the limit? ¿Alguna vez te has enfrentado a un reto deportivo extremo? ¿Valió la pena?
Espero que la entrada os haya resultado, cuanto menos, reflexiva. Que la compartáis o que al menos, interaccionéis con ella para darnos a conocer vuestra opinión. Os recomiendo seguir a Valentí en YT porque crea un contenido muy bueno. Sin más dilación, un saludo runners.
¿Quién marca el límite?: